En un sorprendente giro de eventos, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha emitido órdenes directas a las Fuerzas Armadas del país para que refuercen los planes antiterroristas. Esta medida responde a lo que el mandatario considera operaciones injerencistas en contra de su gobierno por parte de naciones como Estados Unidos y España.

En una reunión con los altos mandos militares, Maduro enfatizó: "Estamos derrotando al terrorismo, pongan eso en su hoja de ruta. Debemos reforzar los planes antiterroristas que nos están enviando desde Estados Unidos, a través de la CIA, y desde España, mediante el CNI (Centro Nacional de Inteligencia)."

El líder venezolano también exhortó a las fuerzas militares a intensificar la búsqueda y captura de individuos que él califica de "terroristas", y a garantizar la eliminación de cualquier intento de desestabilización que pueda llevarse a cabo en el país mediante acciones violentas o sabotajes. En esta misma línea, Maduro denunció que estas acciones externas buscan implantar políticas en Venezuela a través de la violencia.

La situación en Venezuela continúa siendo tensa, y la retórica de Maduro refleja la profunda desconfianza hacia estas potencias extranjeras. Mientras tanto, las críticas de la oposición interna advierten sobre el desvío de atención hacia problemas económicos y sociales, en medio de una crisis prolongada que afecta a millones de venezolanos.

Con estas declaraciones, Maduro parece decididamente alineado con su política antiimperialista, buscando apoyo dentro de sus tropas y entre los sectores de la población que se sienten amenazados por la injerencia extranjera. La pregunta que queda en el aire es: ¿qué medidas concretas tomará el gobierno en los próximos días?