Este año, Fran Rivera (50 años) y Lourdes Montes (40) decidieron trasladar la magia de la Navidad a Laponia, viajando con sus adorables hijos, Carmen y Curro, para disfrutar de una experiencia inolvidable en Rovaniemi, Finlandia. Este viaje es especialmente significativo ya que esperan la llegada de su tercer hijo, lo que convertirá a la familia en una emocionante familia numerosa.

El matrimonio recorrió casi 3.500 kilómetros para llegar al mítico hogar de Papá Noel. Tras un vuelo de aproximadamente cinco horas, aterrizaron en este encantador pueblo situado en el Círculo Polar Ártico, donde se hospedaron en un acogedor resort que cuenta con cabañas de madera rodeadas de un mar de nieve y decoradas de manera espectacular con luces brillantes.

Lourdes, siempre activa en sus redes sociales, compartió momentos mágicos del viaje, mostrando paisajes de ensueño y las entrañables estancias de su alojamiento que tanto encantaron a sus seguidores. En un entorno donde las temperaturas descendían hasta los 15 grados bajo cero, la familia no dejó que el frío apagara su entusiasmo. "¡Buenos días! ¿Dónde estamos?" preguntaba Lourdes con entusiasmo cada mañana, y los niños, llenos de alegría, respondían al unísono: "¡En Laponia!".

La magia de la nieve caía suavemente sobre los techos de sus cabañas, creando un ambiente idílico. En uno de sus videos, Lourdes compartió que eran las nueve de la mañana y que la nieve cubría todo, mientras su hijo comentaba de manera inocente: "Está cayendo del tejado".

Además del descanso, la familia vivió momentos de pura diversión. Visitaron Santa Park, donde los pequeños pudieron disfrutar de actividades típicas de la temporada, como enviar cartas a Papá Noel, alimentar renos y hasta hornear sus propias galletas navideñas. ¡Una experiencia que les llenó de alegría y emoción!

Fran tampoco se quedó atrás en la diversión. Con su característico humor, subió un video donde se le veía junto a una divertida escultura de un búho de piedra, comentando: "Aquí estoy con un amigo que me he encontrado. No habla mucho, pero observa todo".

Este viaje a Laponia no solo es un recuerdo inolvidable para Fran y Lourdes, sino también una escapada perfecta para disfrutar de la familia antes del gran cambio que se avecina con la llegada de su tercer hijo. La pareja ha mostrado una conexión más fuerte que nunca, disfrutando al máximo de la magia del invierno en el norte de Europa, y dejando claro que, a pesar de las frías temperaturas, el verdadero calor está en el amor familiar.