La victoria del Valencia Basket sobre La Laguna Tenerife (96-81) en la jornada 6, que fue aplazada debido a la DANA, se ha convertido en un tema candente en el mundo del baloncesto español. Esta victoria, que inicialmente llenó de alegría a los aficionados taronjas, podría estar en peligro por un posible error administrativo: el uso indebido de Amida Bridah, quien fue alineado tras fichar por el Valencia hace solo tres semanas. Sin embargo, este jugador ya había disputado un partido con el BAXI Manresa en la misma jornada, lo que podría violar las reglas de la ACB.

La normativa, específicamente el artículo 35.3 de la ACB, es clara al estipular que ningún jugador puede participar en un partido aplazado si ha competido con otro club en la misma jornada. A pesar de esto, Bridah jugó más de siete minutos con su antiguo equipo antes de que el partido del Valencia se llevara a cabo después de que fuera reprogramado por las condiciones climáticas.

La Laguna Tenerife ha decidido firmar el acta del partido bajo protesta, lo que sienta las bases para una posible denuncia contra el Valencia Basket. Esta situación ha sido confirmada por varias fuentes y ha levantado una gran inquietud dentro de la ACB. Todo parece indicar que, aunque el club levantó la victoria, un despiste administrativo podría costarles mucho más que dos puntos en la tabla.

Relevo ha informado que la ACB tiene un sistema interno para evitar este tipo de irregularidades, pero al parecer, no funcionó en este caso, permitiendo que Bridah fuera inscrito y jugara 17 minutos a pesar de la clara prohibición.

Este escándalo podría no solo afectar la posición del Valencia Basket en la liga, sino también abrir la puerta a más controversias sobre el cumplimiento de las normas en el baloncesto español. La Liga se enfrenta a un dilema que podría tener repercusiones graves, y todos los ojos están puestos en lo que sucederá en las próximas horas. ¿Podría el Valencia perder su lugar en la cima de la Liga Endesa? La incertidumbre reina y la tensión está en aumento.