‘En la alcoba del sultán’: una joya cinematográfica que desafía nuestra percepción del cine
2024-11-15
Autor: José
En ocasiones, son las máquinas las que contienen la poesía del mundo. A principios del siglo XX, una de estas máquinas arribó a Marruecos de la mano de Gabriel Veyre, un innovador y operador de cámara de los hermanos Lumière. Siguiendo su legado, la última obra del director español Javier Rebollo, ‘En la alcoba del sultán’, rinde homenaje a una figura del primitivo cinematógrafo, creando una oda a la magia y la utopía que representa el cine.
‘En la alcoba del sultán’ se presenta como una delicada y estimulante rareza en el cine español, una feliz extravagancia que narra una historia basada en hechos reales en un país exótico e imaginario, conocido como El País de Nour, que en árabe significa luz. En este entorno, un joven sultán que se destaca por sus elegantes calcetines rojos se enamora de una misteriosa máquina que ha llegado desde Europa. Las imágenes de su reino, llenas de color y naiveté, evocan el orientalismo de Pasolini en películas como 'Medea' o 'Las mil y una noches', así como las simetrías y los personajes del cine de Wes Anderson. A través de la tipografía de los rótulos y un aire de fantasía lejana, también rinden homenaje a las películas de aventuras del viejo Hollywood. Este cruce inclasificable de estilos encuentra su propio espacio en esta película modesta, surrealista y alegre, libre de la nostalgia convencional.
Sin embargo, Rebollo (conocido por ‘La mujer sin piano’, ‘Lo que sé de Lola’ y ‘El muerto y ser feliz’) no se detiene allí. Agrega una capa alegórica y fantasmal donde el cine se entrelaza con espectros y los sombríos fumaderos de opio. Gabriel Veyre, quien se volvió adicto a los efluvios de la amapola tras su estancia en Japón, se embarca en otro sueño: la supuesta invención de una nueva máquina capaz de manifestar el alma de las imágenes.
El guion brillante, coescrito por Rebollo y Luis Bértolo, junto a la impresionante fotografía de Santiago Racaj y el montaje de Marine de Contes, da vida a una película repleta de momentos y secuencias memorables. Desde la escena de la siesta en el palacio, donde suena de fondo una melódica petenera, hasta los gestos melancólicos de la enigmática compañera de Veyre, Jeanne Girel, encarnada por Pilar López de Ayala. Especialmente impactante es la revelación del descreído escocés, quien desde una ventana descubre algo asombroso que fascina tanto a él como al espectador contemporáneo: las imágenes de ‘Le Village de Namo’, un travelling rodado en 1900 en Indochina por Veyre, donde unos niños corren entre risas hacia la cámara. Todo un “milagro”, como lo describe el escocés, maravillado por la belleza que tiene ante sus ojos.
Con un valioso conjunto de archivos documentales, fotografías y postales de época, ‘En la alcoba del sultán’ se transforma en una celebración del misterio del cine, abordando sus conceptos con humor y sencillez, accesibles a todos. Es una película sabia, singular y divertida, comparable a esos cuentos populares sobre mitos y leyendas, que ahora se enriquecen con la azarosa vida de Gabriel Veyre, el sultán Abd al-Aziz de Marruecos y la máquina de los sueños. ¡No te la pierdas, una experiencia que desafía la imaginación y la propia esencia del cine!