¡La incontinencia urinaria también afecta a hombres y nadie habla de ello!
2024-11-05
Autor: Ana
La incontinencia urinaria es un tema que comúnmente se relaciona con las mujeres, pero ¿sabías que también afecta a los hombres? A medida que los hombres envejecen, el riesgo de experimentar incontinencia urinaria aumenta considerablemente. Según la doctora Carmen González Enguita, jefa de Urología en el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid, «la prevalencia aumenta significativamente después de los 45 años y se vuelve más común en hombres mayores de 70 años».
Los factores que contribuyen a la incontinencia en hombres son variados. Cirugías como la prostatectomía pueden dañar los nervios que regulan la micción y afectar el esfínter urinario, el cual es crucial para contener la orina. Además, condiciones de salud como la diabetes pueden afectar los nervios de la vejiga, y enfermedades neurológicas como el Parkinson, accidentes cerebrovasculares y esclerosis múltiple también pueden jugar un papel determinante.
Para mitigar estos problemas, la doctora sugiere ejercicios específicos para fortalecer los músculos del suelo pélvico. Los ejercicios de Kegel son ampliamente recomendados, ya que ayudan a los hombres a reconocer y fortalecer los músculos necesarios para el control de la micción. La clave radica en aprender a contraer y relajar estos músculos de manera controlada y repetitiva, lo que a menudo requiere orientación profesional en Unidades de Rehabilitación del Suelo Pélvico.
No obstante, hay otras alternativas que también son efectivas. La práctica de abdominales hipopresivos, pilates y yoga puede contribuir significativamente en el fortalecimiento muscular. Realizar estos ejercicios de manera constante, y bajo la supervisión de un médico rehabilitador o fisioterapeuta especializado, es vital para obtener los mejores resultados.
Si después de un programa inicial de rehabilitación no se logra recuperar el control de la micción, puede ser necesario seguir con un programa de rehabilitación más avanzado. Es importante recordar que no hay que dejar de lado la rehabilitación del suelo pélvico, ya que puede ser efectiva incluso en etapas posteriores.
Realizar cambios en el estilo de vida también es crucial para prevenir las pérdidas urinarias. Se recomienda evitar alimentos y bebidas irritantes para la vejiga, como comidas muy especiadas, cafeína y alcohol. Además, llevar un control adecuado de la ingesta de líquidos y mantener un peso saludable puede reducir la presión sobre la vejiga.
También es eficaz establecer horarios regulares para ir al baño, lo cual ayuda a entrenar la vejiga y generar hábitos saludables. Y, por supuesto, es fundamental identificar otras enfermedades que puedan estar contribuyendo a la incontinencia, como problemas cardíacos, respiratorios, circulatorios, diabetes y problemas prostáticos.
Para los hombres que siguen experimentando pérdidas a pesar de adoptar estas medidas, existen diversas opciones terapéuticas dependiendo del tipo y gravedad de la incontinencia. Esto puede incluir desde tratamientos conductuales y ejercicios específicos hasta medicamentos como los anticolinérgicos que reducen las contracciones involuntarias de la vejiga.
La rehabilitación también puede incluir el uso de técnicas de ‘biofeedback’, estimulación eléctrica y procedimientos de neuroestimulación vesical, que han mostrado resultados prometedores.
Aunque la incontinencia urinaria puede aparecer a cualquier edad, la clave está en abordarla de manera abierta y buscar ayuda. Tanto hombres como mujeres se benefician al hacer de este un tema de conversación habitual, en lugar de un tabú. ¡Recuerda, no estás solo, y hay estrategias y tratamientos que pueden mejorar significativamente tu calidad de vida!