El Real Madrid de Carlo Ancelotti ha logrado una hazaña impresionante: alcanzar 38 partidos sin perder en LaLiga, culminando con una victoria contundente frente al Espanyol (4-1). Desde su última derrota en el Metropolitano la temporada anterior, los blancos han cosechado 28 victorias y 10 empates, dejando atrás récords que equipos legendarios como los de Guardiola o Mourinho nunca lograron igualar.

Rodrygo, uno de los jóvenes talentos del equipo, destacó la dificultad de la tarea: “Es más difícil de lo que parece”. Este éxito es un testimonio de la habilidad de Ancelotti, quien ha sabido adaptarse a las necesidades del equipo en momentos críticos. Para enfrentar al Espanyol, el técnico italiano optó por una alineación inesperada, introduciendo cuatro centrocampistas, lo cual contradijo su declaración previa de prefiero un estilo más dinámico y ofensivo. La inclusión de Arda Güler fue clave para prestar armonía al juego, y el equipo se mostró efectivo en la primera parte.

Sin embargo, no se puede atribuir este gran desempeño a un solo estilo de juego. Aunque Ancelotti mantiene su formación habitual de 4-3-3 para partidos importantes, no duda en modificar su estrategia. La flexibilidad para incorporar un 4-4-2, especialmente contra equipos defensivos, es parte de su planificación. Con un tridente estelar y opciones versátiles como Bellingham y Ceballos, el equipo está cada vez más preparado para diferentes circunstancias.

A pesar de las críticas recibidas al inicio de la temporada, el equipo ya ha sumado un título (la Supercopa de Europa) y se encuentra invicto en los estadios. Jugadores como Vinicius, Mbappé, Rodrygo y Bellingham se complementan de manera excepcional, mientras que Valverde sigue mostrando un rendimiento constante.

El crecimiento y la adaptación del equipo a diferentes estilos de juego son esenciales para la aspiración de pelear cada título. La llegada de Mbappé significa un enfoque más ofensivo, sin sacrificar la calidad de juego en el medio campo. Luka Modric sigue brillando, y su conexión con el equipo es indiscutible, promediando más pases que nadie en el partido contra el Espanyol.

A la par, se espera que Eduardo Camavinga, quien se está recuperando de una lesión, regrese pronto y fortalezca aún más el plantel, convirtiéndose en el sucesor ideal de Toni Kroos. Su capacidad para recuperar balones y generar juego lo convierte en una pieza clave para el estratega italiano.

Sin embargo, no todo es perfecto. Ancelotti mostró su frustración al reconocer que su equipo ha tenido dificultades para abrir el marcador en los primeros tiempos de los partidos. En los últimos diez juegos oficiales, solo han anotado un gol antes del descanso, lo que es un motivo de preocupación para el cuerpo técnico. Rodrygo comentó que el entrenador dejó claro su descontento en la charla previa al partido, señalando que debían mejorar en este aspecto, y aunque lograron una victoria, el primer tiempo terminó sin goles.

¿Podrá Ancelotti encontrar la fórmula perfecta para encestar desde el comienzo? La afición espera ansiosa la próxima actuación en el derbi del domingo contra el Atlético, donde buscarán mantener su racha histórica y superar los constantes desafíos en su camino hacia la gloria.