¡Revolucionario! Los trasplantes de microbiota fecal podrían transformar la salud mental de perros con epilepsia
2024-11-07
Autor: Carmen
La epilepsia, tanto en humanos como en perros, no solo presenta desafíos físicos, sino que también está acompañada de comorbilidades psicológicas como la ansiedad y la disfunción cognitiva, que son difíciles y costosas de tratar. Recientes investigaciones han revelado que el trasplante de microbiota fecal (TMF) podría ser la clave para mejorar la calidad de vida de los perros afectados.
Un equipo de la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencias Biomédicas de Texas A&M, junto con el Centro de Neurociencia de Sistemas en Hannover, ha llevado a cabo un estudio innovador evaluando cómo el TMF podría aliviar los síntomas negativos de salud mental en perros con epilepsia, especialmente aquellos que son resistentes a medicamentos.
El estudio contó con la participación de nueve perros diagnosticados con epilepsia resistente a fármacos (ERF) y alteraciones conductuales. Los investigadores utilizaron un donante fecal con epilepsia pero un comportamiento normal, lo que resultó en una total respuesta favorable al tratamiento convencional que le permitió estar libre de convulsiones a largo plazo.
Los procedimientos de TMF se realizaron en tres ocasiones, con intervalos de dos semanas, y se realizaron seguimientos a los tres y seis meses posteriores. Además, se realizaron análisis exhaustivos que incluyeron cuestionarios validados y pruebas específicas para medir síntomas asociados al TDAH, ansiedad, y disfunción cognitiva.
Las muestras de sangre proporcionaron información sobre las concentraciones de medicamentos anticonvulsivos y neurotransmisores, mientras que las muestras fecales fueron analizadas para determinar el índice de disbiosis en la microbiota intestinal.
Los resultados fueron alentadores: tras los trasplantes, los perros mostraron mejoras significativas en sus comportamientos relacionados con el TDAH, así como una disminución en los niveles de neurotransmisores excitatorios como el aspartato y glutamato, y un aumento del ácido gamma-aminobutírico (GABA), lo cual sugiere un cambio positivo en la salud mental de los animales.
El investigador Jan S. Suchodolski enfatiza la conexión entre la salud general de un individuo y su salud intestinal, señalando el impacto directo del eje intestino-cerebro en el bienestar emocional.
Los hallazgos sugieren que el TMF podría ser un nuevo enfoque para tratar las comorbilidades conductuales en perros con epilepsia, aunque el uso de bacterias vivas de perros sanos, como Procanicare Plus de Ecuphar, sigue siendo una opción más accesible y efectiva.
Ecuphar desarrolla continuamente productos basados en el microbioma canino, centrados en mantener un equilibrio bacteriano y apoyar la salud intestinal. Con el enfoque correcto, estos tratamientos innovadores podrían mejorar significativamente la calidad de vida de muchos perros.
¡Los dueños de mascotas deben estar al tanto! Este avance en los tratamientos de la salud mental canina podría marcar la diferencia en cómo abordamos la epilepsia y sus efectos colaterales en nuestros fieles amigos.