
¡Revolución en las cárceles de Marruecos! Lanzan brazaletes electrónicos para frenar el hacinamiento
2025-08-30
Autor: Carmen
Cárceles al borde del colapso
Las prisiones de Marruecos están enfrentando una crisis alarmante. Con más de 100,000 internos y una ocupación del 160%, la situación se ha vuelto insostenible. Imagina tener que compartir una pequeña celda diseñada para una sola persona con dos reclusos más. Para combatir este hacinamiento extremo y también reducir los costes del sistema penitenciario, el gobierno marroquí ha implementado novedosos sistemas de penas alternativas.
Innovaciones para un sistema más humano
Entre las nuevas medidas se destacan los brazaletes de vigilancia electrónica, trabajos comunitarios y multas en lugar de prisión para delitos menores. Según la Delegación General de la Administración Penitenciaria y de la Reinserción, la población carcelaria ha aumentado un asombroso 40% en la última década, revelando un verdadero desastre humanitario.
Condiciones inhumanas y medidas urgentes
Las condiciones en las cárceles son críticas, con menos de 1.73 metros cuadrados de espacio por preso, muy por debajo de lo que estipula la ONU. El Observatorio Marroquí de las Prisiones ha emitido un fuerte llamado de atención sobre la emergencia en las cárceles, afirmando que hemos superado el umbral que garantiza condiciones humanas de detención.
Penas alternativas en acción
Recientemente, un tribunal en Agadir hizo uso de esta nueva normativa, optando por una multa en lugar de dos meses de prisión por venta ilegal de alcohol. Sin embargo, de las diferentes alternativas propuestas, solo la de los brazaletes ha comenzado a implementarse, mientras que otras medidas, como los trabajos comunitarios, aún están pendientes.
Objetivos y desafíos
Marruecos se está esforzando por alinear su sistema penitenciario con los estándares internacionales, aunque la Fiscalía ha admitido que esto será complicado, especialmente en ciertas regiones. Se prevé que la implementación de tecnologías de vigilancia y mantenimiento representará un desafío económico.
Un futuro más esperanzador?
Las nuevas medidas están dirigidas a delitos menores y buscan ofrecer una segunda oportunidad a los condenados. Además, se estima que estas reformas podrían generar un ahorro anual de unos 30 millones de euros. Sin embargo, los reincidentes y delitos graves, como terrorismos y corrupción, quedarán excluidos.
Una esperanza para el cambio
El Observatorio Marroquí de las Prisiones ha destacado que la introducción de penas alternativas podría ser una solución eficaz para la crisis penitenciaria del país. Con más de 100,000 reclusos en sistemas que apenas pueden alojar a 70,000, los cambios son urgentes y necesarios.