Pedro Sánchez tomó su escaño con una sonrisa forzada, un gesto que en el ámbito político se conoce como 'hacerse un Pantoja', en referencia a la famosa cantante que siempre parece sonreír en los momentos más difíciles. Después de sufrir una derrota significativa en la votación del día anterior, Sánchez necesitaba proyectar confianza, incluso si eso significaba mostrar unos dientes que difícilmente reflejaban su verdadero estado de ánimo.

Al recibirlo, Alberto Núñez Feijóo no se contuvo y lanzó una crítica cargada de munición pesada: "Ha pasado usted de tener problemas con la verdad a tener problemas con quienes la cuentan. No se veía una cosa así desde la dictadura de Franco. Hay casos de corrupción abiertos y una legislatura marcada por la incertidumbre".

La tensión en el Congreso es palpable, y la oposición no ha perdonado ni un instante para recordarle al presidente los escándalos que han salpicado a su gobierno, poniendo en duda la credibilidad de su gestión. Observadores políticos advierten que esta situación podría desencadenar una crisis de gobernabilidad si no se aborda con seriedad.

¿Podrá Pedro Sánchez revertir esta situación y recuperar la confianza de los ciudadanos, o se convertirá en un nuevo 'Pantoja' de la política, donde sólo queda el show y nada más? Las próximas semanas serán decisivas. ¡No te pierdas esta historia en desarrollo!