El lunes 16 de septiembre marcó un hito en Usera con la activación de la primera zona del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en el barrio de Moscardó. Tras la aprobación del Ayuntamiento y el apoyo de los residentes durante el inicio del verano, ahora 3.100 plazas de aparcamiento están reguladas por parquímetros.

La nueva zona SER está delimitada por las calles de Manuel Noya, el paseo de Santa María de la Cabeza, la avenida del Manzanares y la calle Marcelo Usera. Según el mapa proporcionado por el Ayuntamiento, dentro de este área se han pintado 2.743 plazas verdes, especialmente reservadas para residentes, y 357 plazas azules.

Esta es solo la primera fase de lo que será una expansión significativa en el distrito, ya que en los próximos meses se implementarán otras dos zonas SER en Almendrales y Pradolongo. La decisión fue apoyada por los vecinos a través de la plataforma Decide Madrid, lo que demuestra un gran nivel de participación ciudadana. Además, se planea incluir una parte de Moscardó que aún no ha sido regulada en esta primera fase.

Los nuevos parquímetros vienen con un mayor control sobre el estacionamiento indebido. Los vigilantes, equipados con vehículos que tienen cámaras automáticas, se encargarán de monitorizar las matrículas de los coches, asegurándose de que solo los vehículos autorizados aparquen en esas áreas. Es importante tener en cuenta que las multas por estacionar sin permiso ascienden a 90 euros, lo que podría afectar seriamente el bolsillo de los infractores.

¿Cómo funciona el nuevo sistema SER en Moscardó?

Los residentes empadronados en Moscardó pueden solicitar una autorización del SER, por un costo de 24,60 euros anuales o 2,05 euros mensuales. Con esta autorización, los residentes pueden aparcar en las plazas verdes sin límite de tiempo y en las plazas azules desde las 20:00 hasta las 21:00 horas. Además, en las vías que delimitan el barrio, podrán estacionar en las plazas verdes de ambas aceras.

Los conductores no residentes tienen un tiempo máximo de estacionamiento de dos horas, siempre que obtengan un ticket del parquímetro. Es crucial destacar que estacionar en las plazas verdes es significativamente más caro que en las azules, por lo que conviene a los no residentes planificar bien su aparcamiento. Una vez alcanzado el límite de dos horas, estarán obligados a esperar una hora antes de volver a estacionar en el mismo barrio.

Esta iniciativa no solo tiene como objetivo regular el aparcamiento, sino que también busca mejorar la movilidad y disminuir el tráfico en Usera, ofreciendo a los vecinos una mayor facilidad para encontrar aparcamiento. ¡Esté atento a próximas actualizaciones y no olvide revisar bien la normativa antes de aparcar!