El entrenador del Baskonia, Pablo Laso, ofreció una conferencia de prensa tras la dura derrota de su equipo ante el Monaco en el segundo partido de la jornada doble de Euroliga. Durante más de una hora, Laso se reunió con sus jugadores en el vestuario, lo que retrasó su aparición ante los medios de comunicación.

Laso comenzó reconociendo el buen desempeño del Monaco: «Primero, quiero felicitar a Monaco. El inicio de partido ha sido crucial y nos sacaron mucha ventaja. No pudimos igualar la energía que ellos mostraron en el primer cuarto, y eso hizo la diferencia. La reacción en el tercer cuarto fue buena, tanto en la lectura del partido como en la energía, pero nos quedamos sin fuerzas. Ellos tienen grandes jugadores que supieron manejar esa diferencia. Ahora debemos pasar página y enfocarnos en el partido del domingo».

El técnico vitoriano expresó su preocupación por el inicio del encuentro: «No me gustan las inercias. Necesitamos mostrar desde el principio una sensación de energía y dureza que no tuvimos. Esto es algo que debemos cambiar y mejorar. También considero importante la mejora individual de algunos jugadores, ya que los errores cometidos desde el principio afectan al equipo. Mi objetivo como entrenador es que, independientemente de los resultados, el equipo progrese. A veces, incluso al perder, se aprende, y esta semana ha sido muy reveladora para mí».

Laso subrayó la importancia de la evaluación continua: «Antes de expresar lo que veo, necesito analizarlo con mis asistentes y asegurarme de que los jugadores estén al tanto. No es normal discutir públicamente las cosas buenas y malas sin un análisis previo. Mi enfoque no se centra solo en un partido, sino en el trabajo a lo largo del tiempo. Algunas cuestiones se detectan con el tiempo y te obligan a mejorar».

Además, aclaró que no hay novedades en su charla con los jugadores: «No les he dicho nada que no les haya comentado anteriormente. Les recordé que somos un equipo capaz de competir, pero debemos mejorar en muchos aspectos».

Laso también enfatizó la necesidad de elevar el nivel de energía: «Cuando te enfrentas a un adversario como Monaco, es evidente que la falta de energía puede costarte caro. Cada jugador debe demostrar su compromiso y yo, como entrenador, debo analizar el porqué de esto. También existen aspectos más técnicos que se deben trabajar, ya que hay errores que se repiten con frecuencia».

Por último, mencionó que cada equipo y cada jugador son únicos, lo que requiere una valoración particular de cada situación en el juego. «Me he extendido más de lo habitual hoy porque quería abordar varios temas con los jugadores y, además, enfrentamos una semana exigente por delante», concluyó Laso.