«Las matemáticas son apasionantes, ¡pero se enseñan de manera muy mecánica!»
2025-01-21
Autor: Carmen
Todo comenzó durante la cuarentena del COVID-19, un periodo que despertó nuevas aficiones y talentos ocultos en muchas personas. La curiosidad de Pablo Freire, un estudiante de Ourense, lo llevó a mirar hacia el cielo y descubrir su amor por la astronomía y las matemáticas. Casi cinco años después, Pablo ha subido al podio en múltiples competencias matemáticas. En 2023, este joven del IES As Lagoas se consagró como uno de los cuatro ganadores de las Olimpiadas Matemáticas Nacionales Junior, dirigidas a estudiantes de 2º de ESO, y en 2024 logró el primer premio en la Olimpiada Matemática Galega, donde su hermana Raquel ocupó el segundo lugar. Juntos, junto a David Lago de Redondela, representaron a Galicia en la fase nacional. Este año ha vuelto a ganar el campeonato autonómico y estará compitiendo a nivel estatal en marzo en Gijón, donde estará acompañado por otros talentosos estudiantes que ostentan los puestos de honor en la competición.
Alcanzar este elevado nivel de competencia requiere de una preparación rigurosa y constante, aunque Pablo destaca que la disciplina sola no es suficiente. «Para ganar y ser el mejor hay que estudiar más que nadie, pero también es crucial que te apasione. Las matemáticas deben ser divertidas. Si no te divierten, no vale la pena prepararse», afirma con convicción.
Su interés por las matemáticas nació cuando comenzó a explorar fórmulas que le permitieran profundizar en la astronomía. Aunque todavía mantiene su fascinación por los astros, ha decidido que su futuro se centrará en las matemáticas, siguiendo los pasos de sus padres, también matemáticos. Por ahora, sus áreas favoritas son la geometría y la combinatoria.
La pasión de Pablo por las matemáticas no se limitó al aula. En sexto de primaria, siguiendo el ejemplo de su hermana, se unió al proyecto de estimulación de las matemáticas EsTalMat-Galicia, una iniciativa que ofrece aprendizaje adicional fuera del currículo escolar. Durante tres años participó en sesiones regulares en Santiago, donde descubrió métodos de enseñanza que contrastaban con los que se impartían en las aulas. "Es muy interesante porque aquí se exploran matemáticas que no se darían en el instituto", comenta.
Sin embargo, Pablo critica el enfoque tradicional de la enseñanza matemática en el sistema educativo, que a menudo se centra en la mecanización de ejercicios. "A muchos estudiantes les resulta desmotivador porque se sienten frustrados cuando no logran resolver los problemas, y puede parecerles todo muy mecánico, lo que a su vez lo hace aburrido y sin sentido", sostiene.
Para Pablo, las matemáticas están presentes en todos los aspectos de la vida y son intrinsicamente divertidas. Su pasión se ha visto alimentada no solo por su participación en competiciones, sino también por influencias positivas como la de su profesor Carlos Ferreiro y un grupo de exalumnos olímpicos de Cataluña que ofrecen cursos de preparación online.
No es necesario ser un genio para apreciar y disfrutar las matemáticas. Pablo sugiere despojarse de los prejuicios, ya que pueden ser accesibles a todos. Para los interesados en empezar, recomienda el canal de YouTube Derivando y el libro Apocalipsis matemático de Eduardo Sáenz de Cabezón, que presentan las matemáticas de manera amena y entretenida.