¡Impactante! Elon Musk, CEO de Tesla y X, fue protagonista de un momento controversial durante un discurso en el estadio Capital One, donde ante una multitud de aproximadamente 20,000 seguidores de Donald Trump, realizó un gesto que ha sido comparado con el saludo nazi.

Musk, visiblemente emocionado, se golpeó el pecho y levantó su brazo derecho, proclamando su agradecimiento a los partidarios que, según él, habían logrado regresar al presidente Trump a la Casa Blanca. "Las elecciones van y vienen, pero esta ha sido realmente importante. Quiero agradecerles por hacerlo posible... Gracias a todos, el futuro de la civilización está asegurado," expresó el magnate.

El gesto fue rápidamente interpretado por medios israelíes como un posible saludo fascista. Haaretz tituló su artículo diciendo que "Musk parece hacer un saludo fascista en la toma de posesión de Trump," mientras que Jerusalem Post fue más explícito al mencionar el saludo nazi conocido como 'sieg heil'.

El discurso atrajo críticas inmediatas en redes sociales, donde líderes políticos de España comentaron sobre el gesto. Un portavoz de ERC, Gabriel Rufián, afirmó: "O está pidiendo un taxi o es un nazi de mierda." Mientras tanto, el partido Sumar criticó la falta de disimulo en el gesto, reafirmando la necesidad de condenar tales comportamientos.

En una medida importante, el portal satírico 'El Mundo Today' anunció que dejarían de publicar en la plataforma que Musk dirige, citando este incidente como el motivo principal. "Es por lo del saludo nazi. Claro que es por lo del saludo nazi. Nadie renuncia a 1.5 millones de seguidores a la ligera," aseguró su fundador, Kike García.

Musk se ha consolidado, sin duda, como un ícono de la nueva ola ultraderechista a nivel mundial. Su influencia, respaldada por su posición como la persona más rica del mundo y su cercanía al poder en Estados Unidos, ha generado preocupación entre los líderes políticos europeos. Emmanuel Macron y Pedro Sánchez han comenzado a referirse a Musk y su agenda bajo el término de 'internacional reaccionaria', un concepto que señala la creciente conexión entre empresas tecnológicas y movimientos políticos de extrema derecha.

Este incidente no solo ha encendido los debates en redes sociales sobre la política y los gestos simbólicos, sino que también ha puesto en evidencia cómo figuras tan influyentes pueden modelar decisiones y actitudes en torno a temas tan delicados como el extremismo político. ¡El mundo observa de cerca!