Enrique Chisbert, el inspector jefe de los Bomberos de Valencia, ha comparecido ante la comisión de recuperación tras la devastadora dana que afectó a la ciudad. Durante su intervención, Chisbert expuso que la incertidumbre sobre la situación era extremadamente alta. 'La Aemet no tenía claro el pronóstico', afirmó, sugiriendo que con más información se podrían haber tomado medidas más efectivas para prevenir daños.

Chisbert destacó que, en esos momentos críticos, se trabajó bajo la hipótesis de un posible desbordamiento del río Turia. En este contexto, hizo un llamado a la implementación de cámaras de vigilancia y sistemas de alertas sonoras para notificar a la población sobre posibles riadas.

La DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) ha demostrado ser un fenómeno meteorológico complicado de predecir y gestionar. Este tipo de eventos ha aumentado en frecuencia en los últimos años debido a los efectos del cambio climático, lo que subraya la necesidad de mejorar los sistemas de alerta y respuesta de las autoridades.

Con el recuerdo fresco de las inundaciones que causaron estragos en Valencia, los ciudadanos exigen mayor transparencia y rapidez en la información meteorológica. Chisbert, consciente de esta realidad, enfatizó la importancia de trabajar en conjunto con organizaciones meteorológicas para brindar datos más claros y precisos que ayuden a evitar futuros desastres.

La población de Valencia sigue esperando respuestas efectivas y estrategias preventivas que protejan no solo sus hogares, sino también su seguridad.