El eucalipto, un árbol icónico en países como España, ha dejado atónitos a los científicos en su hogar original, Australia. No solo son fuente de madera y alimento para los adorables koalas, sino que ahora se ha descubierto que estos árboles funcionan como sorprendentes detectores de oro.

Investigadores de la Organización de Investigación Científica e Industrial de la Commonwealth han mostrado que los eucaliptos pueden absorber partículas diminutas de oro del suelo a través de sus raíces profundas, acumulándolas en sus hojas. Este impactante hallazgo, publicado en la prestigiosa revista Nature Communications, plantea la posibilidad de que los eucaliptos cambien radicalmente la forma en que buscamos yacimientos de oro. ¡Un verdadero tesoro verde!

El mecanismo detrás de este fenómeno es impresionante: las raíces de los eucaliptos pueden llegar hasta 30 metros de profundidad, alcanzando vetas subterráneas de oro. Asimilan este metal como si fuera un nutriente, pero dado que el oro es tóxico para ellos, lo aíslan en sus hojas, donde permanece hasta que estas caen al suelo, liberando el oro. ¡Una estrategia natural de defensa que podría abrir nuevas fronteras en la minería!

El estudio aporta pruebas concluyentes sobre la capacidad de los eucaliptos para absorber oro, desechando la idea de que el metal en las hojas fuese simplemente producto de contaminación. Al analizar muestras en los yacimientos de Freddo y Barns, los científicos comprobaron que el oro es absorbido de forma activa por los árboles.

En el yacimiento de Freddo, se encontraron árboles de más de 10 metros creciendo justo encima de un depósito de oro enterrado bajo 30 metros de sedimentos. Las concentraciones de oro encontradas en las hojas secas, ramas, corteza y suelo fueron sorprendentes, alcanzando cifras de hasta 80 partes por billón en las hojas.

Mientras tanto, en Barns, los eucaliptos más pequeños presentaron niveles anómalos de oro en sus raíces y hojas, lo que indica que estos árboles pueden ser indicadores geoquímicos muy precisos, especialmente en áreas donde el suelo está cubierto por sedimentos.

A pesar de la asombrosa naturaleza de este hallazgo, los investigadores aclaran que recoger hojas de eucalipto no es un método práctico para extraer oro debido a las bajas concentraciones del metal. Sin embargo, lo que se vislumbra es un futuro brillante para la exploración minera, donde estos majestuosos árboles podrían ayudar a señalar dónde cavar. ¡La naturaleza nos revela sus secretos y promete revolucionar la minería!