Los investigadores han demostrado que estos fascinantes moluscos marinos tienen una capacidad mental sorprendente y pueden aprender de sus experiencias.

Los cefalópodos, incluyendo a las sorprendentemente inteligentes sepias, han revelado habilidades cognitivas que asombran a los científicos. Un avance reciente en la investigación ha mostrado que las sepias comunes poseen una inteligencia comparable a la de los chimpancés en la toma de decisiones relacionadas con su alimentación, superando incluso pruebas diseñadas para medir la capacidad de espera en niños.

Este estudio, publicado en Proceedings of the Royal Society B, evaluó a seis sepias comunes utilizando un experimento de autocontrol. Los resultados fueron asombrosos: estos animales fueron capaces de esperar más de dos minutos para obtener su alimento favorito, en lugar de conformarse con una opción menos atractiva. ¡Un verdadero examen de paciencia que pone a prueba la inteligencia!

Las sepias, a diferencia de otros animales inteligentes como los primates o los cuervos que suelen utilizar herramientas y viven en comunidades, son cazadores solitarios. Sin embargo, su comportamiento sugiere que tienen un nivel de conciencia que no habíamos considerado antes. Su creciente reconocimiento del entorno y las recompensas les permite actuar con sabiduría.

El experimento simula un juego de la paciencia: los científicos implementaron un sistema de puertas decoradas que las sepias debían aprender a reconocer. Detrás de cada puerta había distintas delicias: gambas vivas, que son su favorita, o trozos de langostino crudo. Al igual que elegir entre un dulce inmediato o esperar por una bolsa llena, las sepias optaron por la elección de mayor recompensa.

Asombrosamente, las sepias que más rápido aprendieron a identificar los dibujos en las puertas fueron también las que demostraron mayor capacidad para esperar por la mejor comida. Este descubrimiento plantea la posibilidad de que, al igual que nosotros, comprendan que la paciencia realmente tiene su recompensa.

Alexandra Schnell, investigadora de la Universidad de Cambridge, sostiene que esta habilidad es crucial en el contexto de su vida. Las sepias constantemente utilizan su excepcional camuflaje para evitar ser presas y solo emergen cuando es imprescindible buscar alimento.

Los investigadores sugieren que esta habilidad de autocontrol podría representar una ventaja evolutiva que les permite alimentarse de manera más efectiva. Su curiosidad ante diferentes situaciones contribuye a entender cuán sesudas y sagaces son estas criaturas del mar.

Además, este descubrimiento va más allá de un simple asombro. Los científicos han hallado que las sepias poseen una memoria comparable a la nuestra, pueden recordar experiencias pasadas y, lo que es más alucinante, tienen la capacidad de crear recuerdos falsos, similar a cómo a veces los humanos confundimos distintos momentos de nuestras vidas.

Las sepias demuestran que la inteligencia en el reino animal puede manifestarse de maneras que jamás habríamos imaginado. Nos enseñan que, a través de diferentes trayectorias evolutivas, es posible desarrollar capacidades mentales extraordinarias, a pesar de las distancias evolutivas entre especies tan diversas como los humanos y estos increíbles moluscos marinos.