Un equipo de científicos surcoreanos ha hecho historia al cultivar con éxito glóbulos rojos caninos durante 20 días, desafiando las limitaciones actuales de las transfusiones de sangre en animales. Este logro innovador es un trabajo de la startup Artblood, que ha colaborado con las prestigiosas universidades de Hanyang y Gyeongsang, y lo han presentado en la conferencia CELL BIO 2024 en San Diego.

Los hallazgos revelan que la creación de sangre artificial podría revolucionar no solo las transfusiones veterinarias, sino también abrir nuevas oportunidades en la medicina humana. Este proceso implicó el uso de células mononucleares de sangre periférica canina, combinadas con citoquinas humanas y caninas, para establecer un entorno óptimo para el cultivo de glóbulos rojos.

¿El futuro de las transfusiones?

Con la constante evolución de la hematología, este método promete ser un avance significativo, especialmente después del reciente descubrimiento de un nuevo grupo sanguíneo que ha dejado perplejos a los investigadores durante 50 años. Los glóbulos rojos cultivados, aunque tienen un tamaño menor que los humanos, son capaces de mantener su forma y transportar oxígeno de manera efectiva.

Este investigación representa un salto monumental en la medicina veterinaria, donde la escasez de donantes de sangre es uno de los problemas más urgentes. El hecho de que se hayan conseguido glóbulos rojos funcionales y viables en un periodo de 20 días significa que los veterinarios podrán realizar transfusiones de emergencia de manera mucho más efectiva.

Además, el cultivo alcanzó su máxima expansión en el día 17, según la investigadora Park Seong-ah. Esto no solo plantea nuevos métodos de tratamiento para animales, sino que también establece un camino emocionante hacia transfusiones en humanos, ya que la similitud entre los glóbulos rojos caninos y humanos puede facilitar futuros tratamientos.

Un futuro prometedor

La colaboración entre Artblood y las universidades participantes demuestra el impacto que puede tener la innovación empresarial en la investigación biomédica. Este avance no solo beneficia a la medicina veterinaria, sino que también tiene el potencial de sentar las bases para desarrollos en transfusiones humanas, cambiando por completo la forma en que se manejan los tratamientos médicos de emergencia.

Sin duda, este es un momento emocionante para la medicina y la ciencia, y estaremos atentos a las próximas etapas de esta revolucionaria investigación. ¡El futuro de las transfusiones está aquí!