Un hombre de 52 años, de nacionalidad argentina, se encuentra en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clínico de Valencia, tras sufrir un ataque brutal por parte de su compañero de piso, un hombre de 37 años de origen belga. El violento episodio ocurrió en una vivienda de acogida para personas sin hogar en la avenida Portugal, Valencia, a última hora de la tarde de ayer.

El presunto agresor, que podría estar lidiando con problemas de salud mental, utilizó un cuchillo de cocina para asestarle varias puñaladas en el cuello. Después del ataque, se sentó tranquilamente en un banco y, con una actitud desgarradora, encendió un cigarro mientras verbalizaba su deseo de ver a su compañero morir.

Los gritos de ayuda de los vecinos alarmaron a las autoridades, quienes recibieron múltiples llamadas al teléfono de emergencias 112 alertando sobre un hombre desangrándose en la entrada de la vivienda. Al llegar, varias patrullas de la Policía y una ambulancia del SAMU encontraron a la víctima gravemente herida. Los paramédicos atendieron inmediatamente al herido, quien presentaba tres cortes, dos de ellos en el cuello, y su estado era tan crítico que casi pierde la vida.

Lo más escalofriante ocurrió cuando el agredido, a punto de ser evacuado, logró mencionar a la policía que su atacante había sido su propio compañero de piso. El SAMU logró estabilizarlo y lo trasladó al Hospital Clínico, pero, lamentablemente, el hombre sufrió dos paradas cardiorrespiratorias, una al llegar al hospital y otra más mientras se encontraba en el quirófano.

El agresor fue detenido sin oponer resistencia y entregó a los agentes el cuchillo utilizado en el ataque. Este caso ha reabierto el debate sobre la seguridad en los refugios para personas sin hogar, destacando la falta de recursos y apoyo para las personas que viven en estas condiciones. La comunidad clama por medidas más estrictas para evitar que nuevas tragedias ocurran, mientras esperan que la víctima logre recuperarse de sus graves heridas.