Ciencia

Groenlandia: el deshielo revela tesoros escondidos que atraen la atención de Trump

2025-01-21

Autor: Lucia

El cambio climático está revolucionando la geopolítica global, y Groenlandia se encuentra en el centro de esta transformación. Con su ubicación estratégica en las rutas marítimas del Ártico, el deshielo está exponiendo grandes recursos naturales que podrían cambiar el panorama energético mundial. Recientes estudios del Servicio Geológico de los Estados Unidos estiman que la costa sureste de Groenlandia podría albergar unos impresionantes 31,400 millones de barriles de petróleo y gas natural.

Más allá del petróleo, Groenlandia podría ser el próximo paraíso para los minerales raros que son fundamentales para la tecnología moderna. Se sospecha que su suelo es rico en 17 minerales esenciales utilizados en la fabricación de baterías, especialmente aquellas para vehículos eléctricos. Estos minerales incluyen escandio, itrio y neodimio, entre otros. Si bien la exploración es complicada debido a las condiciones climáticas extremas, Groenlandia podría proporcionar a Estados Unidos la ventaja competitiva que necesita frente a potencias como China, que domina la extracción de estos recursos.

A medida que el Ártico se calienta cuatro veces más rápido que el promedio global, Groenlandia está experimentando un deshielo acelerado. Este fenómeno no solo afecta el clima local, sino que también interactúa con corrientes oceánicas de gran alcance, lo que podría reconfigurar climas en diversas partes del mundo. Además, el deshielo libera metano, un potente gas de efecto invernadero, del permafrost, elevando aún más las preocupaciones sobre el cambio climático.

Mientras tanto, el primer ministro groenlandés, Mute Bourup Egede, ha adoptado una postura dual: aunque rechaza directamente una posible anexión por parte de Estados Unidos, también busca fortalecer los lazos y mantener un diálogo abierto con el gobierno de Trump. Su comentario sobre "romper los grilletes del colonialismo danés" resuena con el deseo de muchos en Groenlandia de administrar sus propios recursos y decisiones políticas.

El interés de Estados Unidos en Groenlandia no ha pasado desapercibido en el contexto internacional. Líderes europeos han expresado su preocupación sobre las intenciones de Trump. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el canciller alemán, Olaf Scholz, han enfatizado que cualquier cambio territorial debe ser pacífico y mediante acuerdos, y no por la fuerza. Esto plantea interrogantes sobre lo que el futuro próximo podría deparar para esta isla que, aunque remota, está en el epicentro de un nuevo mapa de intereses globales.

Por otro lado, Rusia, también un jugador importante en el Ártico, ha alentado la autodeterminación de los groenlandeses, aunque con un tono irónico, recordando su propia intervención en Crimea. Esto muestra cómo el cambio climático no solo afecta el medio ambiente, sino que también redefine alianzas y conflictos en un mundo que parece estar cada vez más polarizado.

Los próximos años serán cruciales: ¿groenlandeses reclamarán su independencia frente al colonialismo antiguo y moderno, o se convertirán en un campo de batalla geopolítico por recursos cada vez más escasos? La respuesta a esta pregunta podría cambiar la historia de la región para siempre.