¡Increíble pero cierto! El Mundial de balonmano vive momentos de pura adrenalina y emoción. En el segundo partido de cuartos de final, Francia logró un épico triunfo sobre Egipto con un marcador final de 34-33, gracias a un gol de Luka Karabatic que se marcó justo antes del final, obligando a los árbitros a revisar la jugada para confirmar que el balón había cruzado la línea de gol a tiempo.

El encuentro estuvo lleno de tensión y emoción. Con 33-32 en contra, Egipto, que había demostrado un juego formidable, arriesgó todo y atacó con siete jugadores, dejando su portería desprotegida. Yahia Omar logró anotar a solo cinco segundos del pitido final, igualando el marcador en 33-33 y llevando el partido a un desenlace dramático. Sin embargo, en una jugada rápida, Rémí Desbonnet lanzó el balón hacia Luka Karabatic, quien con una calma notable lanzó a puerta vacía y selló la victoria para los franceses. El tanto fue validado por apenas tres décimas de segundo, consolidando así el triunfo de Francia.

El gol de Luka, hermano del legendario Nikola Karabatic, que se retiró tras los Juegos de París, fue la culminación de un gran encuentro que también destacó el crecimiento y potencial de la selección egipcia, considerada una de las grandes potencias emergentes del balonmano mundial. Con un rendimiento impresionante en los últimos años, Egipto ha demostrado ser un equipo temible, incluso para selecciones consolidadas en el ámbito internacional, como España, contra quienes han tenido sólidas actuaciones.

Bajo la dirección de entrenadores españoles, como Juan Carlos Pastor, la selección de Egipto ha continuado su ascenso en el ámbito del balonmano. Pastor ha tomado las riendas después de Roberto García Parrondo, a punto de conseguir grandes logros internacionales.

El partido no comenzó bien para Egipto, ya que Francia rápidamente se puso por delante con un gol del jugador Dika Mem. Sin embargo, los norteafricanos respondieron eficazmente, estableciendo una defensa sólida y, tras varias jugadas brillantes, Seif Eldaraa logró poner a Egipto en ventaja (6-7). El partido se desarrolló de manera muy competitiva, y aunque Francia alcanzó su máxima ventaja antes del descanso (18-14), Egipto demostró su resiliencia al igualar el marcador otra vez con destacadas actuaciones de Ahmed Hesham y Yahia Omar.

La emoción que vivieron los aproximadamente 5.900 espectadores que asistieron al Arena Zagreb fue indescriptible. El balonmano está en auge, y partidos como este demuestran que el deporte está alcanzando nuevas alturas, brindando espectáculo y sorpresas a los fans.

El marcador final refleja no solo la intensidad del juego, sino también el simbolismo de un balonmano en constante evolución.

Ficha técnica

34 - Francia (18+16): Desbonnet (Bolzinger), Dika Mem (6), L. Karabatic (1), Kounkoud (1), Nahi (1), Konan, Briet (4) - equipo inicial -; Minne (5), Remili (6), Bos (2), Prandi (1), Richardson (3, 2p), Tournat (1), Grebille y Fàbregas (3).

33 - Egipto (14+19): Aly (Hendawy), Omar (6, 3p), Seif Eldaraa (5), Nafea (4), Adel (2), Ali Zein (1), Sanad (2) - equipo inicial -; Hany, Abdou (1), Hesham (8), Khairi, El Masry, Yousri, Ramadan (2) y Abdelwahed (2).

Árbitros: Gjorgji Nachevski y Slave Nikolov (Macedonia).

Exclusiones: Konan (3) (Francia); Omar y Khairi (Egipto).

Marcador: 3-1, 4-3, 6-6, 9-8, 14-13, 18-14 (descanso); 21-17, 23-22, 25-24, 29-27, 30-29 y 34-33 (final).

Este emocionante partido ha sido un claro ejemplo de la pasión y el talento que definen el balonmano actual. ¡No te pierdas lo que vendrá en las semifinales!