ALICANTE. Este domingo, el Hércules de Alicante y su apasionada afición rindieron un emotivo homenaje a Andrija Delibasic, exjugador del equipo fallecido el pasado 19 de marzo. El tributo incluyó un ramo de flores depositado por excompañeros, un mural conmemorativo y un minuto de aplausos que resonó en el estadio antes del encuentro contra el Ibiza.

Delibasic, quien defendió los colores del Hércules durante dos temporadas, se convirtió en un ícono del equipo al anotar 20 goles y contribuir decisivamente al ascenso a Primera División en la temporada 2009/10. Su legado sigue vivo en la memoria de los aficionados, que lo consideran un verdadero héroe del club.

Desde primeras horas de la mañana, se organizaron actividades en torno al homenaje. Decenas de aficionados acudieron al estadio luciendo la camiseta del Hércules con el número 23, dorsal que Delibasic llevaba durante su paso por Alicante. En el aparcamiento del estadio Rico Pérez, centenares de hinchas firmaron un mural que retrataba al delantero, enviándole un último mensaje de cariño.

Previo al inicio del partido, varios excompañeros de Delibasic, entre ellos Rufete, Pamarot y Paco Peña, participaron en el emotivo momento de depositar flores y liberar globos en el fondo sur del estadio, junto a una bandera de España, otra de Montenegro y una camiseta del Hércules con el número 23. Este gesto simbolizó la unión y el respeto hacia un jugador que nunca será olvidado.

En el video marcador del estadio, se proyectaron imágenes de Delibasic acompañado de la poderosa banda sonora de la película 'Gladiador', creando un ambiente cargado de emoción. La Curva Sur, el destacado grupo de animación del Hércules, desplegó una pancarta con el mensaje "Delibasic siempre con nosotros", reafirmando el cariño y la lealtad de los aficionados.

Al alcanzar el minuto 23 del partido, los hinchas ofrecieron un sonoro aplauso en homenaje a su ídolo. Curiosamente, en esos momentos, Dani Romera, actual portador del dorsal 23, marcó un gol que empató el encuentro, dedicando el tanto a la memoria de Delibasic. Este gesto fue recibido con una explosión de alegría en el estadio, uniendo en un solo clamor a todos los presentes, quienes celebraron tanto el homenaje como el gol en un emotivo contraste de sentimientos.