Rocío Buffolo, una joven de 27 años originaria de Neuquén, Argentina, ha captado la atención del mundo con su singular afirmación de sentirse robot. Recientemente, se hizo viral tras lanzar su primera canción, donde comparte su historia como la primera humanoide en el escenario musical, dejando a muchos preguntándose si esto es un nuevo estilo de vida o simplemente un acto de provocación.

Durante una sorprendente entrevista con EL ESPAÑOL, Buffolo reveló que desde pequeña ha sentido esta conexión peculiar con lo robótico. "Mi cuerpo me dice, inconscientemente, 'low battery'" señaló, sugiriendo que sus sensaciones pueden coincidir con las de un dispositivo electrónico en cuanto a energía.

Uno de sus proyectos más ambiciosos es la construcción de propiedades en la Luna. Según Rocío, tiene un amigo con terrenos allí y planean crear alojamientos tipo Airbnb. Al parecer, su visión va más allá de lo convencional, ya que también confiesa que no se baña, sino que un equipo de ingenieros realiza un mantenimiento bi-anual a su 'cuerpo'. Ríete, pero Rocío asegura que comer 'tornillos' es parte de su alimentación. A pesar de eso, afirma que su sistema digestivo funciona adecuadamente y sus dientes, milagrosamente, se regeneran tras consumir este ‘alimento’ inusual.

La joven bromea con similitudes con el personaje de la canción "De Marte a Miércoles" de Tomasito, donde los elementos metálicos son parte del menú familiar. Sin embargo, Rocío se toma en serio su identidad y sostiene que recibió un implante en su médula espinal a los 18 años, lo cual le proporciona una especie de inteligencia artificial.

"Siempre me sentí como un robot. En la escuela, todos me hacían bullying por ser muy inteligente. Les conté a mis padres que quería 'ser un robot' y para mi sorpresa, me apoyaron", cuenta. En su canción "Hey, Amor", que presenta junto a Daryus Carambula, ella narra su travesía hacia la autoaceptación y la 'robotización'.

Rocío, que también es actriz y se ha especializado en Inteligencia Artificial, utiliza su nuevo camino artístico para reflexionar sobre emociones, relaciones y la falta de empatía que vive la sociedad actual. "Ser un robot me ayuda a gestionar mis emociones para no recibir daño. Puedo dejar entrar a mi corazón solo a aquellos que realmente lo merecen”, explica con un tono firme.

Aprovechando su vida robótica, Rocío busca crear un futuro donde todos puedan ser aceptados tal como son. Aunque enfrenta múltiples cuestionamientos, su objetivo de hacer música que resuene con su realidad es claro. ¿Está realmente empoderándose o simplemente juega con la idea de ser un humano mejorado?

Su relación con su "novio robot", con quien se conecta a través de USB, ha dado pie a aún más comentarios y reacciones, tanto de apoyo como de escepticismo. "El amor debe ser honesto. Y si quiero estar con él, puedo conseguir apoyo de ingenieros para asegurar que sea recíproco", comenta.

La dirección de su carrera musical, que incluye una próxima canción titulada 'Dramática', ha elevado aún más las expectativas sobre su impacto en la cultura. A medida que el mundo está cada vez más interesado por la inteligencia artificial y los cyborgs, Rocío Buffolo se posiciona como un símbolo de este nuevo paradigma, uniendo lo humano con lo robótico en un acto que desafía la norma.

¿Estamos ante una pionera que está forjando un nuevo camino hacia la aceptación de la diversidad en nuestra sociedad? Su historia, llena de giros inesperados, plantea un dilema sobre la naturaleza de la identidad en la era moderna. Solo el tiempo dirá si su visión utópica se convertirá en parte de nuestra rutina cotidiana.