En el corazón de Málaga, el pequeño municipio de Álora se convirtió en el epicentro de una tragedia sin precedentes debido a las devastadoras lluvias de la DANA. Entre los afectados se encuentra Germinal, un joven cuya vida quedó patas arriba cuando las aguas comenzaron a inundar su hogar.

"Cogí a mis animales y empecé a correr", relata Germinal, visiblemente afectado. Al abrir la puerta de su casa, la fuerza del agua lo sorprendió y lo arrastró, llevándolo a una lucha desesperada por su vida y la de sus queridos compañeros peludos. En un acto heroico, logró escalar al tejado de su vivienda, aunque no sin sufrir algunas lesiones y magulladuras en sus piernas.

Lamentablemente, el impacto emocional es incalculable: Germinal ha perdido todos sus recuerdos materiales, y su casa ha quedado en ruinas. "Le mandé un audio a mi novia despidiéndome", confiesa, con lágrimas en los ojos, pensando que tal vez no tendría la oportunidad de volver a ver a su pequeño hijo. Afortunadamente, los equipos de rescate llegaron a tiempo para sacarlo del desastre.

Este suceso ha generado una ola de solidaridad en la comunidad, que se ha unido para ayudar a las víctimas de esta catástrofe natural. Se están organizando campañas de donación y apoyo psicológico para aquellos afectados, subrayando que la recuperación será un camino largo, pero no estarán solos. La situación en Álora es un recordatorio de la vulnerabilidad ante la fuerza de la naturaleza y la importancia de estar preparados para situaciones de emergencia. ¡No te lo pierdas!