El reciente lanzamiento de los iPhone 16 ha desencadenado nuevamente el debate sobre si estos dispositivos ofrecen las suficientes innovaciones para que los usuarios actuales de iPhones consideren una actualización, o si son atractivos para aquellos que piensan en dar el salto de Android a iOS. Tras probar el iPhone 16 Pro, queda claro que este dispositivo sigue en lo más alto, destacando por su calidad de fabricación, especificaciones avanzadas, innovaciones notables y, por supuesto, su valor de mercado. La marca Apple es sinónimo de confianza para muchos consumidores, ya que los dispositivos de la firma se deprecian muy poco en su primer año, a diferencia de otros teléfonos que pueden perder hasta un 30% de su valor en seis meses.

El diseño del iPhone 16 Pro puede parecer continuista, pero en realidad representa un cambio significativo respecto a sus predecesores. Aunque mantiene dimensiones similares a las del modelo anterior, se ha aumentado el tamaño de la pantalla de 6.1 a 6.3 pulgadas (en el iPhone 16 Pro) y de 6.7 a 6.9 pulgadas en el modelo Pro Max. El nuevo diseño presenta un marco extremadamente delgado alrededor de la pantalla Super Retina XDR, que sigue ofreciendo una experiencia visual excepcional con soporte para 2,000 nits de brillo y frecuencia de actualización de hasta 120 Hz, reduciendo así la fatiga ocular.

Una de las características notables del iPhone 16 es el nuevo botón de Control de Cámara, que permite acceder rápidamente a la cámara, capturar fotos o grabar vídeos de manera más intuitiva. Este botón, situado en el lateral derecho, mejora el agarre y la experiencia de toma fotográfica al emular el disparador de una cámara tradicional. Además, se espera que con futuras actualizaciones de software, este control incluya funciones avanzadas, como la posibilidad de fijar el enfoque y la exposición con un suave toque.

El sistema de triple cámara ha mejorado considerablemente: ahora cuenta con un sensor ultra gran angular de 48 Mpx (anteriormente solo 12 Mpx) y un zoom óptico que llega hasta 5 aumentos. Los usuarios pueden tomar fotografías en formatos ProRAW y HEIF, ofreciendo así versatilidad en la calidad de imagen. La selección de estilos fotográficos también ha sido ampliada, permitiendo a los usuarios personalizar la estética de sus fotografías de forma sencilla.

En cuanto a grabación de vídeo, el iPhone 16 Pro permite grabar en 4K y 120 f/s, proporcionando una calidad cinematográfica con Dolby Vision, ideal para quienes buscan crear contenido de alto impacto. Los micrófonos de calidad de estudio mejoran la captura del sonido, garantizando audio espacial para una experiencia envolvente al utilizar dispositivos complementarios como los AirPods o las gafas Apple Vision Pro.

El chip A18 Pro, fabricado con tecnología de 3 nanómetros, ofrece un rendimiento superior, especialmente cuando Apple Intelligence esté disponible, permitiendo una eficiencia avanzada en la gestión del dispositivo. Además, este procesador optimiza la duración de la batería, que ahora puede llegar hasta 27 horas en reproducción de vídeo.

En términos de diseño, el iPhone 16 Pro presenta acabados en titanio y Ceramic Shield, que son más resistentes que otras pantallas de smartphones. Los precios continúan siendo los mismos que los del año pasado, comenzando desde 1,219 euros para el iPhone 16 Pro, lo que enfatiza el valor que ofrecen estas nuevas características.

Por otro lado, el modelo básico, el iPhone 16, empieza desde 959 euros y presenta características también destacadas, como el nuevo Control de Cámara y el chip A18, aunque con menos capacidades que el Pro. Este modelo puede ser una opción atractiva para quienes vienen del ecosistema Android, gracias a su ligero peso y el rendimiento optimizado de iOS 18.

Una innovación importante en toda la gama del iPhone 16 es la mejora en la seguridad, gracias a la capacidad de conectarse a satélites para enviar mensajes en áreas sin cobertura móvil. Con iOS 18, también se incorpora la función de compartir vídeo en vivo con servicios de emergencia.

Sin duda, el iPhone 16 Pro no solo proporciona mejoras técnicas y estéticas, sino que también sigue siendo una opción sólida para aquellos que buscan calidad y desempeño en un smartphone.