El árbitro Carlos del Cerro Grande ha emitido un contundente mensaje en respuesta a la controversia que generó su actuación durante el partido entre el Mallorca y el Espanyol. Durante el encuentro, surgió una pancarta inquietante en la que se veía una diana sobre su cabeza junto al texto: "Se busca Carlos del Cerdo Grande". Esta situación ha puesto de relieve un problema grave que enfrenta el mundo del fútbol, la violencia hacia los árbitros.

En sus declaraciones, Del Cerro Grande afirmó: "Los agentes del fútbol no podemos naturalizar la violencia". Hizo hincapié en la necesidad de trabajar juntos para mejorar la percepción pública de los árbitros, quienes a menudo son objeto de críticas desmedidas y agresiones tanto en los estadios como en las redes sociales. Además, destacó que el respeto y la integridad son fundamentales en el deporte.

El Comité Técnico de Árbitros (CTA) y el club Espanyol han emitido reacciones en apoyo al árbitro, condenando cualquier forma de violencia y afirmando que el fútbol debe ser un espacio seguro para todos los involucrados. La violencia en el deporte no solo afecta a los árbitros, sino que también perjudica a los jugadores y la experiencia de los aficionados.

En un momento en que el fútbol atraviesa crisis de conducta y agresiones, es imperativo que las instituciones tomen medidas efectivas para erradicar este fenómeno. Del Cerro Grande subrayó que, como comunidad futbolística, debemos esforzarnos para crear un ambiente que promueva el respeto y la deportividad, ya que todos merecen disfrutar del juego sin miedo.