Con la llegada de la temporada de gripe, el aumento de casos en Catalunya ha alarmado a la población. Se estima que el pico de contagios se alcanzará esta semana, lo que ha llevado a muchos a buscar soluciones para fortalecer su sistema inmunológico, siendo los suplementos vitamínicos una de las opciones más populares. Sin embargo, no todos los suplementos son compatibles entre sí, y combinarlos incorrectamente puede ser perjudicial para la salud.

La farmacéutica María José Alonso Osorio de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), advierte que es esencial saber cómo combinar estos nutrientes para evitar interacciones negativas. Ella explica que "los micronutrientes en los complementos alimenticios están formulados para que se equilibren entre sí, pero hay ciertas combinaciones que debes evitar a toda costa".

Combinaciones desaconsejadas

Entre las combinaciones más desaconsejadas, encontramos:

1. **Vitamina C y B12**: Altas dosis de vitamina C pueden disminuir la absorción de B12.

2. **Vitamina D y B12**: Dado que la vitamina D es liposoluble y la B12 hidrosoluble, tomarlas juntas puede afectar su eficacia. Es preferible ingerir la vitamina D con alimentos grasos y la B12 con agua.

3. **Ácido fólico y B12**: El exceso de ácido fólico puede reducir las concentraciones de B12 en el organismo.

4. **Hierro, té y calcio**: El té contiene taninos que inhiben la absorción de hierro. Se recomienda tomar hierro con zumo de naranja para mejorar su absorción, y espaciar su ingesta de alimentos ricos en calcio.

Además, la experta también menciona la importancia de cuándo tomar cada vitamina. La cronobiología es la ciencia que estudia cómo el momento del día afecta la absorción y eficacia de los nutrientes. Según Alonso, los suplementos multivitamínicos y minerales son más efectivos cuando se toman por la mañana con un desayuno nutritivo y abundante. Las vitaminas liposolubles A, D, E y K deben tomarse con alimentos ricos en grasas, mientras que las del grupo B, al ser energizantes, también son mejores por la mañana.

En cuanto al hierro, se recomienda tomarlo con el estómago vacío, preferiblemente por la mañana. El magnesio, que puede beneficiar el sueño, se sugiere ingerir por la noche. La melatonina, que regula los ciclos de sueño, debe consumirse justo antes de acostarse.

Finalmente, a pesar de todos estos consejos, la experta señala que no es necesario suplementar si no existen deficiencias evidentes. Sin embargo, el invierno y los virus pueden justificar la inclusión de vitamina C y D, además de minerales como el selenio, como refuerzo del sistema inmunológico. ¡No dejes que un simple error en la suplementación arruine tu salud! Consulta siempre a un profesional antes de iniciar cualquier régimen de vitaminas.