
¡Cuidado! Dolor de garganta: ¿una molestia común o podría ser amigdalitis?
2025-09-10
Autor: Marta
La llegada del dolor de garganta en verano
Con la llegada del buen clima, muchos de nosotros bajamos la guardia ante un clásico problema: el dolor de garganta. Sin embargo, este síntoma, que generalmente asociamos al frío, también puede manifestarse en verano y, en ocasiones, alertar sobre una infección más seria como la amigdalitis.
¿Qué es la amigdalitis?
La amigdalitis, según el doctor Carlos Ruiz Escudero, jefe del Servicio de Otorrinolaringología de hospitales de Quirónsalud en Madrid, es 'una inflamación o infección de las amígdalas palatinas, vulgarmente conocidas como anginas'. A menudo se confunde con la faringitis o un simple dolor de garganta, pero sus implicaciones son diferentes. La faringitis afecta las paredes de la faringe, mientras que el dolor de garganta es más un síntoma general que puede surgir de múltiples causas, desde infecciones hasta irritaciones por humo o aire seco.
¿Por qué puede aparecer en verano?
Aunque las amigdalitis son más comunes en invierno, pueden surgir en los meses de calor. El doctor explica que los cambios bruscos de temperatura, como entrar a un lugar con aire acondicionado o consumir bebidas muy frías, pueden ser detonantes, sobre todo en personas más vulnerables. Estos cambios térmicos debilitan el sistema de defensa natural de la mucosa, permitiendo que virus y bacterias entren al organismo.
Es un mito común que consumir helados o no abrigarse bien provoca amigdalitis. 'No es el frío en sí lo que causa la infección, sino su efecto debilitante sobre la mucosa defensiva', aclara el doctor.
Grupos de riesgo ante la amigdalitis
Aunque es más frecuente en niños debido a su sistema inmunológico en desarrollo y su exposición en entornos como guarderías, los adultos también pueden verse afectados, especialmente si tienen factores predisponentes como tabaquismo, alergias o un sistema inmunitario comprometido. Aquellos con déficit inmunológico, ya sea por enfermedades subyacentes o tratamientos, también corren un mayor riesgo.
Clasificación y tratamiento de la amigdalitis
Las amigdalitis pueden ser virales o bacterianas. Para diferenciarlas, es crucial una evaluación médica que a veces incluye análisis adicionales. Los síntomas más comunes son dolor intenso de garganta, dificultad para tragar, fiebre y ganglios inflamados en el cuello. El tratamiento de antibióticos solo se recomienda si la causa es bacteriana, y el uso indiscriminado de medicamentos puede resultar contraproducente.
En casos severos de infecciones recurrentes, podría considerarse la amigdalectomía, aunque no existe evidencia que sugiera que esta operación aumente el riesgo de otras infecciones respiratorias. Por el contrario, puede ser una solución a un problema recurrente.
Consejos para prevenir la amigdalitis en verano
Para evitar la amigdalitis, especialmente en verano, el doctor recomienda: 1. Evitar cambios bruscos de temperatura. 2. No abusar de bebidas excesivamente frías. 3. Mantener una adecuada respiración nasal y evitar respirar por la boca. 4. Dormir bien y llevar una dieta equilibrada para fortalecer el sistema inmunológico.
Finalmente, es crucial no automedicarse y consultar al médico si el dolor de garganta persiste o viene acompañado de fiebre. Un diagnóstico clínico adecuado es esencial para evitar errores y el uso innecesario de antibióticos, lo que contribuye al aumento de la resistencia bacteriana, un desafío creciente en la medicina moderna.