La pesadilla sigue sin tregua para el Manchester City. Después de un inicio de temporada desastroso en la Premier League, la Champions y la EFL Cup, los hombres de Pep Guardiola buscaban desesperadamente un cambio de rumbo ante el Everton, un equipo que no ganaba en el Etihad Stadium desde 2010. Sin embargo, aunque los locales comenzaron bien, el encuentro terminó en un sorprendente empate que extiende la angustia para los citizens.

El partido arrancó con una versión notable del City, dominando la posesión y creando múltiples ocasiones. Desde el primer minuto, el equipo mostró su intención con un potente cabezazo de Gvardiol que impactó en el travesaño de la portería defendida por Jordan Pickford. La presión ejercida por el City pronto dio frutos: a los diez minutos, Bernardo Silva, tras una brillante asistencia de Doku, abrió el marcador con un disparo cruzado dentro del área, poniendo el 1-0 en el marcador.

Pese al gol, el Everton no se dio por vencido. Los visitantes, a partir del minuto 20, empezaron a animarse en ataque y, tras un error de definición de Bernardo Silva desde el punto de penalti, el equipo de Sean Dyche sorprendió al City. En su primera clara llegada, Doucouré centró desde la derecha y Ndiaye, en una gran acción individual, estableció el 1-1 al controlar el balón y definir con precisión.

En la segunda mitad, el City parecía tener el control e incluso tuvo un penalti a favor, cometido por Mykolenko sobre Savinho. Sin embargo, Haaland falló en la ejecución, siendo detenido por Pickford, un especialista en paradas de penaltis. Este error fue crucial, ya que, aunque el City continuó dominando el balón, el impulso del equipo se disipó, dejando la puerta abierta para el Everton.

El final del partido estuvo lleno de emociones. El Everton, con algunas oportunidades claras, casi logra llevarse los tres puntos, pero falló en la definición. Por su parte, el City se volcó en búsqueda del gol, pero sus intentos fueron en vano, culminando con un disparo elevado de Rico Lewis que pudo asegurar la victoria. El empate deja al Manchester City con serias dudas sobre su futuro en la temporada, mientras que el Everton respira aliviado tras lograr un importante punto en su lucha por la salvación.

Con esta actuación, se generan preguntas sobre la capacidad de Guardiola para revertir la situación. ¿Podrá el City cambiar el rumbo en los próximos partidos o su crisis seguirá profundizándose? La incertidumbre está en el aire y los aficionados están ansiosos por ver cómo se desarrollarán los próximos encuentros.