El doctor Mario Alonso Puig, destacado experto en salud y envejecimiento, aborda cada semana temas de vital importancia en el programa 'Herrera en COPE'. En su reciente intervención, abordó el envejecimiento y su relación con el Alzheimer.

Durante la conversación, el doctor enfatizó que el envejecimiento no es algo que deba temerse, sino que invita a reflexionar sobre cómo estamos cuidando nuestra salud a lo largo de los años. "Es fundamental preguntarse si uno se está cuidando lo suficiente para vivir el tiempo que se pueda vivir, y así contribuir al bienestar propio y de otros", afirmó Puig.

El envejecimiento es un tema debatido que se divide en dos corrientes: una que lo ve como un proceso natural inevitable y otra que considera que es una enfermedad que se debe tratar como tal. Comparó la longevidad humana, que podría llegar hasta los 120 años, con la sorprendente longevidad de algunas especies como el tiburón boreal, que puede vivir más de 500 años.

Japón se presenta como un modelo a seguir, con una esperanza de vida promedio de 87 años, gracias a su dieta rica en vegetales y pescado, y un enfoque en reducir alimentos procesados. "Una dieta adecuada puede ser clave para alargar la vida, mientras que el exceso de comida no saludable puede acortar nuestra existencia", advirtió Puig, subrayando los beneficios de cuidar la microbiota intestinal, que juega un papel crucial en nuestra salud.

El doctor Puig también lanzaba un mensaje alentador para aquellos que han mantenido malos hábitos alimenticios durante años: "Siempre se puede generar un nuevo hábito. La capacidad de recuperación del organismo humano es asombrosa, y cualquier esfuerzo por hacer cambios positivos se notará, sin importar la edad".

Además, enfatizó la importancia de un sueño reparador. Estudioso de la relación entre el sueño y la salud cognitiva, reveló que dormir menos de cinco horas puede llevar a un deterioro cognitivo comparable al de alguien que ha consumido alcohol. Puig también advirtió sobre los peligros de conducir tras haber dormido poco, citando un estudio que evidenció el aumento de accidentes relacionados con la privación del sueño.

En cuanto a la falta de actividad física, el doctor mencionó que la realización de ejercicio regular no solo mejora la salud física, sino que también puede ayudar a desarrollar áreas del cerebro que se ven afectadas por el sedentarismo. Estudios realizados con ratones han mostrado que la actividad física mejora el desarrollo de estructuras cerebrales, contrastando con los efectos negativos del sedentarismo.

Otro tema relevante en su intervención fue la técnica CRISPR-Cas9, que ha revolucionado la genética. Esta herramienta permite editar genes defectuosos, lo que podría abrir nuevas posibilidades para tratar enfermedades relacionadas con el envejecimiento, incluido el Alzheimer. "Imagina poder corregir genes defectuosos de manera precisa, esto podría cambiar el futuro de la medicina", concluyó el doctor.

Puig nos invita a reflexionar sobre nuestras rutinas diarias y la manera en que pueden impactar nuestra calidad de vida y nuestro envejecimiento.