Un grupo de científicos japoneses ha asombrado al mundo al recibir uno de los prestigiosos premios Ig Nobel, o "Antinobel", en una ceremonia celebrada en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) este jueves. Estos investigadores, liderados por Takanori Takebe de la Universidad Médica y Dental de Tokio, han demostrado que los mamíferos, incluidos ratas y cerdos, pueden absorber oxígeno a través del recto, un proceso que han denominado "respiración anal".

En sus experimentos, los científicos inyectaron un líquido rico en oxígeno por el ano de los animales, lo que resultó en un incremento significativo de la oxigenación en la sangre y una notable mejora en las tasas de supervivencia de aquellos que sufrían problemas respiratorios. Este innovador descubrimiento no solo abre la puerta a nuevas investigaciones, sino que también ha dado inicio a ensayos clínicos que buscan establecer si este método podría ser efectivo en el tratamiento de fallos respiratorios en humanos.

En la ceremonia de entrega de premios, que anualmente parodia los Nobel, los ganadores se unieron a un selecto grupo de otros diez premiados. Entre los curiosos reconocimientos, se destaca uno proveniente de Francia, que reveló que el cabello tiende a enroscarse en sentido horario, especialmente en el hemisferio norte. Otra investigación premiada exploró la inusual idea de alojar palomas vivas dentro de misiles para guiarlas durante su trayectoria.

Además, se entregaron premios a estudios que examinaron plantas reales que imitan a las artificiales, así como un ingenioso análisis que utilizó cromatografía para diferenciar entre gusanos ebrios y sobrios.

La ceremonia, la número 34 desde su creación, también contó con la participación de ganadores anteriores y expertos que tuvieron que resumir sus investigaciones en 24 segundos y luego en siete palabras. Los asistentes disfrutaron de un ambiente cálido y divertido, lleno de bromas, caricaturas y el entusiasmo de un público que lanzó aviones de papel al aire.

Este peculiar evento es una celebración del ingenio científico y recuerda a todos que la curiosidad y la diversión también tienen su lugar en la ciencia. Sin duda, el descubrimiento de la "respiración anal" podría traer consigo nuevas soluciones médicas y abrir un nuevo campo de estudio que transforme nuestra comprensión de la biología.