Recientes operativos de la Brigada Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones (PDI) han conducido a una de las más significativas incautaciones de droga en la provincia de Osorno, al sur de Chile. En un exitoso despliegue que ha sorprendido a las autoridades, cinco integrantes de una banda dedicada al narcotráfico han sido arrestados.

Este hecho se produjo cuando dos mujeres, parte del grupo delictivo, cruzaron la frontera hacia Perú para adquirir ketamina y clorhidrato de cocaína. Al regresar a Chile, fueron interceptadas en el paso fronterizo Chacalluta, donde se descubrieron 45 paquetes que contenían nada menos que 33 kg de ketamina y 17 kg de clorhidrato de cocaína, según informó el fiscal de Río Negro, Jorge Raddatz.

Un duro golpe al crimen organizado en Osorno

Las investigaciones no terminaron ahí. Con la información recabada, los agentes de la PDI realizaron múltiples allanamientos en el área urbana de Río Negro, resultando en la detención de otros cómplices implicados en la venta de estas peligrosas sustancias. Durante los operativos, además de la incautación adicional de 1.5 kg de drogas, se encontró un arma de fuego modificada, lo que elevó la gravedad del caso.

El fiscal Raddatz confirmó que fueron detenidas 3 mujeres y 2 hombres, todos mayores de edad, enfrentando graves cargos, incluyendo tráfico de drogas, asociación ilícita y tenencia ilegal de armas. El Tribunal de Garantía de Río Negro dictó prisión preventiva para todos los acusados, excepto para una mujer que tuvo un papel más secundario en la operación delictiva.

Una alerta para los jóvenes: el peligro de la ketamina

El fiscal calificó esta incautación como la mayor del año, enfatizando la peligrosidad de la ketamina, droga que está ganando terreno entre los jóvenes y que puede causar efectos devastadores en la salud. El plazo otorgado por el Tribunal para cerrar la investigación es de 90 días, y se espera que este caso sirva como advertencia sobre los riesgos del narcotráfico y su efecto en la comunidad.

Con cada incautación, las fuerzas del orden demuestran su compromiso en la lucha contra el narcotráfico y buscan desmantelar redes que amenazan la seguridad de la población.