Las actrices Mariana Loyola, Paola Lattus y Gabriela Arancibia han alzado la voz tras ser acusadas de hacer amenazas en los Premios Caleuche, donde el actor Gonzalo Valenzuela las señaló de querer quemar el teatro Mori y de contratar hackers para interferir en la transmisión. Aunque las mencionadas exigieron una rectificación, la respuesta de los medios fue insatisfactoria.

Durante la ceremonia del 31 de enero de este año, Valenzuela hizo acusaciones graves sin nombrar a las implicadas, lo que desencadenó una serie de acontecimientos. Francisca García-Huidobro, conductora de Only Fama, reveló los nombres de las actrices durante el programa, lo que contribuyó a que su reputación se viera gravemente afectada.

Mariana, Paola y Gabriela, dolidas por la repercusión de estas acusaciones, enviaron cartas a los responsables de los programas exigiendo el derecho a réplica. Sin embargo, solo recibieron una respuesta parcial de 'Only Fama'; según ellas, la conductora solo leyó algunas frases de su carta, mientras que en Chilevisión decidieron no mencionarla en absoluto, violando así su derecho bajo la Ley de Prensa.

"Nos sentimos obligadas a actuar debido a la seriedad de las acusaciones que han manchado nuestros nombres. Nos hemos visto perjudicadas tanto profesional como personalmente. Si no se toma acción en contra de estos actos, el daño a nuestra imagen puede ser irreparable", declararon en un comunicado conjunto.

El caso destaca un problema creciente en el mundo del espectáculo, donde las acusaciones públicas sin fundamento pueden ser devastadoras. Las actrices no solo exigen una rectificación, sino que también buscan que se establezca un precedente sobre el respeto y la justicia en la industria. Su lucha no se limita al ámbito personal; representa un rayo de esperanza para todas las mujeres en el medio que a menudo enfrentan ataques y calumnias sin repercusiones para quienes las hacen.

Este incidente ha abierto un debate sobre la responsabilidad de los medios en la difusión de noticias y acusaciones, y el impacto que tienen en la vida de los involucrados. Las actrices esperan que su valentía inspire a otras a alzar la voz y luchar contra la difamación.