
¿El futuro de la medicina privada en Argentina: acceso para todos o un lujo exclusivo?
2025-09-18
Autor: Sofía
Un sistema de salud en crisis
La situación de la salud en Argentina es crítica y demanda atención urgente. Con el sistema público debilitado por recortes presupuestarios y las obras sociales enfrentando fragmentación, la medicina privada se ha vuelto inaccesible para una gran parte de la población debido a sus altos costos. En este contexto, surge la pregunta: ¿la medicina privada será accesible para todos o se convertirá en un privilegio de unos pocos?
Concentración del mercado
Recientes cambios gubernamentales han acelerado la concentración en el sector. De más de 600 empresas registradas en la Superintendencia de Salud, solo 198 han comenzado los trámites para adecuarse, y apenas 47 han logrado autorización para operar en igualdad de condiciones con las obras sociales sindicales. Esta situación perjudica a las empresas más pequeñas, que no pueden hacer frente al aumento de costos en tratamientos y medicamentos.
Desigualdad en el acceso a la salud
La viabilidad empresarial no es el único problema; la equidad en el acceso a la salud se ve gravemente afectada. A medida que las cuotas se incrementan, los salarios no se ajustan en la misma medida, lo que convierte a los tratamientos y medicamentos en un desafío inalcanzable para muchos. La clase media, en particular, enfrenta dificultades para mantener una cobertura privada, sacrificando otros aspectos esenciales de su vida.
Un sistema que colapsa
El resultado es un sistema donde las personas con recursos pueden acceder a servicios de calidad, mientras que quienes no pueden pagar quedan atrapados en un sistema público que está al borde del colapso, evidenciado por largas listas de espera y escasez de insumos.
El papel del Estado es crucial
Es imperativo que el Estado intervenga. La salud no es un simple problema de oferta y demanda; en situaciones de emergencia, los pacientes no eligen precios. La intervención estatal debe garantizar condiciones claras, regular precios de medicamentos y negociar con la industria farmacéutica, priorizando así la sostenibilidad del sistema.
Desigualdades regionales crecientes
Además, transferir la responsabilidad a las provincias sin un marco nacional efectivo resulta ineficaz y poco solidario. Cada jurisdicción luchando por su cuenta solo aumentará las desigualdades regionales. Mientras algunas provincias podrán responder adecuadamente, otras dejarán a sus ciudadanos a la deriva, dependiendo exclusivamente de un sistema público precario.
Defendiendo el derecho a la salud
La discusión no debería centrarse solamente en cuánto se puede pagar, sino en cómo asegurar que la salud permanezca como un derecho universal. Si la medicina privada se convierte en un privilegio de pocos, se romperá el sistema solidario. La salud pública, privada y las obras sociales deben trabajar en conjunto, mediante una planificación solidaria, para evitar que los hospitales públicos colapsen y garantizar atención digna a todos, independientemente de sus ingresos.