Un avance asombroso ha sido reportado que podría cambiar el curso del futuro de la humanidad. ¡Se han hallado reservas masivas de un elemento químico en la Tierra, que podrían asegurar el suministro energético del planeta durante los próximos dos siglos! Este descubrimiento no solo representa una fuente de energía casi ilimitada, sino que también ofrece la oportunidad de generar energías limpias, pieza fundamental para combatir el cambio climático, una de las crisis más urgentes que enfrentamos en la actualidad.

El hallazgo de una colosal reserva de hidrógeno puro podría ser el salvavidas de nuestro planeta.

Geoffrey Ellis y Sarah Gelman, geólogos de la U.S. Geological Survey (USGS), han encontrado en un campo de Bourakebougou, Malí, cantidades extraordinarias de hidrógeno acumulado. Se estima que hay alrededor de 5,6 billones de toneladas métricas de este recurso escondidas bajo la superficie. Interesantemente, solo extrayendo un 2% de esta masa, podríamos satisfacer la demanda energética mundial por dos siglos enteros.

¿Cómo se formó este hidrógeno bajo la tierra?

Una de las características más notables del hidrógeno es que es un elemento natural, lo que significa que no requiere intervención humana para formarse. Este proceso ocurre a partir de reacciones químicas entre minerales y agua a grandes profundidades en la corteza terrestre. El hidrógeno se origina a través de un fenómeno conocido como serpentinizacion, donde ciertas rocas ultramáficas que contienen hierro y magnesio reaccionan con agua a altas temperaturas y presiones.

La serpentinizacion provoca la alteración de los minerales, liberando así moléculas de hidrógeno (H₂). Este proceso es común en zonas de actividad tectónica, como fallas geológicas y dorsales oceánicas. A pesar de ser un elemento ligero, los estudios recientes demuestran que el hidrógeno puede quedar atrapado en reservorios subterrános durante millones de años, lo que abre la puerta a su posible extracción.

Cabe destacar que algunos expertos se muestran escépticos sobre la viabilidad de la extracción. Las reservas frecuentemente se encuentran a profundidades significativas, lo que conlleva desafíos logísticos y técnicos para acceder a ellas. Además, muchos yacimientos podrían ser relativamente pequeños, haciendo que la inversión en su explotación no sea rentable. La falta de tecnología adecuada para llevar a cabo esta extracción es otro obstáculo que se debe superar.

Ante estos desafíos, el descubrimiento de estas reservas masivas de hidrógeno genera tanta esperanza como incertidumbre, pero el potencial de proporcionar una solución sostenible al cambio climático es indiscutible.

La pregunta que queda en el aire es: ¿Lograremos desarrollar la tecnología necesaria para convertir este hallazgo en una realidad y así salvar nuestro planeta? ¡Mantente atento a las noticias sobre este fascinante avance!