Con el anuncio de Donald Trump sobre un posible aumento de aranceles al cobre y otros metales, el Ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Alberto Van Klaveren, ha confirmado la creación de un ‘grupo de trabajo’ para abordar esta situación crítica.

Tras participar en el comité ejecutivo de la Confederación de Producción y Comercio (CPC), Van Klaveren reveló al Diario Financiero que se estableció este grupo a través de la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (Subrei) junto con el Ministerio de Hacienda. Su objetivo es analizar y monitorear los flujos comerciales entre Chile y Estados Unidos, así como evaluar el impacto que estos aranceles podrían tener en la economía nacional.

“Estamos comprometidos a proteger los intereses de nuestros exportadores y de nuestra economía. La relación comercial con Estados Unidos es fundamental, ya que dicho país exporta más a Chile de lo que nosotros les enviamos”, destacó el canciller.

En palabras del ministro, la relación con el país norteamericano se ha mantenido en una tendencia positiva, aunque el futuro depende de las decisiones que tome la administración de Trump. La preocupación aumenta considerando que el presidente ha mencionado que “en un futuro muy cercano vamos a imponer aranceles a la producción extranjera de chips de computadora, semiconductores y productos farmacéuticos”.

No solo eso; Trump también advirtió que contemplaría aranceles adicionales al acero, el aluminio y el cobre, lo que podría representar un golpe duro para las exportaciones chilenas, especialmente en un país donde el cobre es un recurso esencial para la economía.

Este anuncio ha generado incertidumbre entre los empresarios chilenos, que temen que el aumento de aranceles afecte la competitividad de los productos nacionales. En este sentido, los exportadores de cobre, uno de los principales productos del país, están en alerta máxima y esperan que el gobierno pueda establecer medidas adecuadas para mitigar el impacto.

La creación del grupo de trabajo es un paso positivo en la dirección de proteger los intereses comerciales de Chile, pero todos los ojos estarán pendientes de las próximas decisiones de la administración Trump, que podrían alterar el rumbo de las relaciones comerciales entre ambos países.