El espacio de Sumar y los partidos que lo constituyen se encuentran en una encrucijada tras la reciente dimisión de Íñigo Errejón, cuya decisión ha impactado profundamente la escena política en España. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, convocó a su grupo parlamentario para discutir el ahora llamado 'caso Errejón', en medio de acusaciones de violencia machista que han sacudido a la formación.

Díaz, que dejó la dirección de Sumar luego de los decepcionantes resultados en las elecciones europeas, se reunirá con los miembros de su partido a las 16:00 horas para abordar una crisis que se intensificó mientras ella se encontraba en un viaje oficial en Colombia.

"Nuestro compromiso contra el machismo y por una sociedad feminista es firme y sin excepciones", declaró Díaz el mismo día que Errejón presentó su renuncia. La ministra enfatizó la necesidad de apoyar a todas las mujeres que se atrevan a denunciar maltratos o acoso.

Errejón ya no tiene escaño en el Congreso, y fuentes dentro de Sumar han informado que la decisión sobre el nuevo portavoz podría no resolverse en la reunión de hoy, aunque hay un consenso general de que la nueva voz en el Congreso debería ser una mujer.

Los partidos dentro de Sumar, como IU, Más Madrid, Compromís y los Comunes, se enfrentan a una de sus mayores crisis tras la salida de uno de sus líderes más influyentes. La situación ha generado desconfianza entre los votantes, lo que podría repercutir en futuras elecciones.

El portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, admitió que este episodio ha "quebrado la confianza de mucha gente" y reconoció que los "mecanismos de detección han fallado". Antonio Maíllo, coordinador general de IU, subrayó que la situación "abre en canal a la izquierda" y exigió una introspección sobre cómo se están tomando las decisiones dentro de la organización.

La controversia se desató tras una denuncia presentada por la actriz y presentadora Elisa Mouliaá, quien acusó a Errejón de acoso sexual. En su relato, Mouliaá describe un incidente ocurrido en septiembre de 2021 durante una fiesta en Madrid, donde Errejón, supuestamente, la encerró y la molestó sin su consentimiento. Esta grave acusación ha llevado a un mayor escrutinio sobre la conducta de figuras públicas en el ámbito político.

El Congreso ha confirmado que Errejón ya no es diputado y, por lo tanto, no tiene la condición de aforado. En caso de haberla tenido, el caso habría sido juzgado por el Tribunal Supremo. La situación plantea un interrogante: ¿Cómo responderá Sumar a esta crisis interna y qué mensaje enviará a sus electores sobre su compromiso con la igualdad y la lucha contra la violencia de género? Preparémonos para observar las decisiones que se tomen en las próximas horas.