En un nuevo giro en la dramática guerra de Ucrania, el Ministerio de Defensa de Rusia ha anunciado este domingo la captura de dos localidades estratégicas en las regiones de Donetsk y Járkov. Según el comunicado oficial, las fuerzas rusas lograron tomar Sontsivka, cerca de Kurájove, y Lozova, en el noreste del frente, lo que intensifica aún más las tensiones en la región.

La localidad de Lozova fue asegurada por la agrupación de tropas Zapad, que opera en la región de Járkov. Por otro lado, la agrupación Centro se apoderó de Sontsivka, una posición crucial que está situada al norte de Kurájove. Expertos militares advierten que este bastión estratégico podría caer en manos rusas antes de que finalice el año, lo que podría cambiar drásticamente el curso del conflicto.

No solo esto, el día anterior, el Ministerio de Defensa ruso había informado sobre la conquista de otra localidad cercana a Kurájove, un avance que fue confirmado por la plataforma de seguimiento ucraniana DeepState.

Estas victorias, si bien pueden ser vistas como significativas a nivel regional, son parte de una estrategia más amplia que busca consolidar el control ruso en el sur del Donbás y avanzar hacia la frontera administrativa con Zaporiyia. Esta maniobra ha llevado a muchos a especular sobre el futuro del conflicto y el alcance de las ambiciones rusas.

Analistas militares han señalado que Moscú podría estar marcando sus objetivos a corto plazo en la captura del asentamiento Velika Novosilka, lo cual facilitaría el cerco de ciudades claves como Pokrovsk y Kostiantinivka. Estas maniobras son trazadas para allanar el camino hacia una ofensiva final programada para 2025, con la meta de tomar Kramatorsk y Sloviansk, considerados dos de los últimos bastiones importantes en la región de Donetsk.

Sin embargo, el avance ruso no estará exento de desafíos. El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) ha expresado dudas sobre las estimaciones del Estado Mayor ruso, que calcula una conquista de 4,500 kilómetros cuadrados para 2024. De acuerdo al ISW, Rusia necesitaría cubrir un adicional de 8,000 kilómetros cuadrados para lograr un control total de Donetsk.

En el contexto actual, la comunidad internacional sigue de cerca los movimientos en esta región, mientras que las tensiones entre Rusia y Ucrania continúan en aumento. La incógnita sobre el desenlace de este conflicto sigue latente, haciendo que el mundo contenga la respiración ante la posibilidad de un conflicto más amplio y devastador en Europa.