Este viernes, una catástrofe ha sacudido a Serbia: al menos 14 personas han perdido la vida y decenas han sufrido heridas tras el colapso de un voladizo en la estación de trenes de Novi Sad, la segunda ciudad más grande del país. La fiscalía de la región de Voivodina ha confirmado la devastadora noticia.

El incidente ocurrió alrededor del mediodía cuando una parte de la estructura cedió sobre las puertas de entrada de la estación, donde había una gran aglomeración de pasajeros. Según el alcalde de Novi Sad, Milan Duric, más de 30 personas han resultado heridas, incluidas dos mujeres que quedaron atrapadas entre los escombros y fueron rescatadas cinco horas después. Tres de los heridos se encuentran en estado crítico en el hospital.

Ante la magnitud de la tragedy, el Gobierno serbio ha declarado un día de luto nacional, mientras que la alcaldía de Novi Sad ha ampliado este luto a tres días. El ministro del Interior, Ivica Dacic, inicialmente reportó ocho muertes, pero la cifra se incrementó rápidamente a 14 conforme se recuperaban más cuerpos de entre los escombros.

"La operación de rescate es compleja y continuará durante varias horas. Contamos con cerca de 80 rescatistas y maquinaria pesada trabajando en el lugar," afirmó el ministro Dacic. La respuesta de la comunidad ha sido abrumadora: más de 300 ciudadanos han acudido al Instituto de Transfusión Sanguínea de Voivodina para donar sangre, demostrando la solidaridad del pueblo serbio en tiempos difíciles.

La estación de trenes de Novi Sad, construida en 1964, fue renovada en 2021 y nuevamente restaurada este año, reinaugurándose el 5 de julio. El trabajo de renovación fue realizado por un consorcio chino, lo que ha llevado a cuestionamientos sobre la calidad de las reformas. El ingeniero de construcción Vladimir Tijanicha sugirió que es posible que se hayan realizado cambios estructurales que podrían haber contribuido al desplome del voladizo.

El primer ministro Milos Vucevic calificó este día de "viernes negro" para toda Serbia y especialmente para Novi Sad. "A pesar de que este edificio tiene décadas, estamos comprometidos a identificar a los responsables de esta tragedia", declaró a la prensa.

Este trágico suceso ha desatado una ola de indignación y demanda de respuestas, ya que la seguridad de las infraestructuras en Serbia se convierte en un tema prioritario y urgente. Se espera que las investigaciones comiencen inmediatamente para esclarecer las causas del colapso y garantizar que algo así no vuelva a ocurrir.