¿Tienes párkinson? ¡Bailar podría transformar tu vida y combatir la depresión!
2024-12-26
Autor: Carlos
La danza como terapia: la mejor medicina para los afectados por el párkinson
"Bailando, me paso el día bailando". ¿A quién no le suena este clásico? Pero más allá de la diversión, la ciencia respalda la danza como un poderoso aliado para la salud física y mental. Aquí te dejamos algunos beneficios sorprendentes:
Mejor salud cerebral.
Investigaciones publicadas en 'The New England Journal of Medicine' han descubierto que bailar no solo puede fortalecer la memoria, sino que también puede prevenir la aparición de demencia. Los ejercicios aeróbicos de baile pueden incluso revertir la pérdida de volumen en el hipocampo, una región del cerebro crucial para la memoria que tiende a encogerse en la adultez tardía.
Reduce el estrés.
Un estudio publicado en 'Journal of Applied Gerontology' reveló que moverse al ritmo de la música, especialmente en pareja, puede aliviar la tensión de manera efectiva.
Ayuda a perder peso.
Más movimiento generalmente significa una mayor quema de calorías. Un trabajo de investigación en 'PLoS One' recomienda el baile para ayudar a bajar de peso.
La lista de beneficios sigue y sigue: mayor energía, menor riesgo cardiovascular, mejor condición física y equilibrio, y un impulso notable en la salud social y emocional. Pero enfoquémonos en un aspecto crítico: la relación entre el baile y el párkinson.
Baile y párkinson: una conexión vital
La depresión afecta a aproximadamente 280 millones de personas en el mundo y es considerada un síntoma prodrómico de enfermedades neurodegenerativas cada vez más comunes, incluida la enfermedad de Parkinson (EP). Se estima que más de 10 millones de personas padecen esta condición, que está en aumento a nivel global, como lo documenta la revista 'The Lancet'.
Los pacientes con párkinson frecuentemente se quejan de síntomas no motores como ansiedad, depresión y demencia, que impactan significativamente su calidad de vida. Sin embargo, los tratamientos convencionales para el párkinson, como la terapia de reemplazo de dopamina, a menudo se centran en los síntomas motores, pasando por alto estos aspectos críticos.
A pesar de que los tratamientos farmacológicos tradicionales pueden ser efectivos, también suelen acompañarse de efectos secundarios desagradables. En contraste, los programas de danza diseñados específicamente para personas con párkinson han demostrado reducir los síntomas motores y mejorar el estado de ánimo y la calidad de vida de estos pacientes.
Nuevas evidencias científicas
Un reciente estudio publicado en el 'Journal of Medical Internet Research', llevado a cabo por investigadores de la Universidad de York (EE. UU.), ha revelado que bailar puede reducir significativamente la depresión asociada con el párkinson. Este estudio incluyó a 23 participantes diagnosticados y 11 controles sanos que sirvieron como comparativa.
Los participantes asistieron a clases de baile semanalmente durante 8 meses, experimentando desde ejercicios básicos hasta danzas más complejas. Los investigadores se centraron en el giro cingulado subcalloso (SCG), una región cerebral vinculada a la depresión. Antes y después de cada clase, los participantes completaron escalas de depresión, y los resultados fueron sorprendentes.
Descubrieron que después de cada clase, los índices de depresión informados disminuyeron de manera acumulativa, con mejoras significativas tras 8 meses. También se observaron cambios en la actividad cerebral que enlazaban estas mejoras con el SCG, lo que indica que bailar tiene efectos directos en la regulación emocional.
Para quienes viven con párkinson, la danza no solo es una forma de ejercicio, sino un poderoso medio para mejorar el bienestar emocional, social y mental. **¡No subestimes la terapia del baile!** Con 14 años de experiencia bailando con pacientes, el profesor Joseph DeSouza afirma que, aunque la danza no reemplaza un tratamiento médico, sus efectos positivos en los participantes son indiscutibles. ¡Anímate a bailar y transforma tu vida hoy mismo!