Arnold Schwarzenegger, el icónico actor conocido por su papel en 'Terminator', ha decidido apoyar a la candidata demócrata Kamala Harris en las próximas elecciones presidenciales del 5 de noviembre. A pesar de haber sido gobernador de California entre 2003 y 2011 bajo el Partido Republicano, Schwarzenegger ha manifestado su descontento con Donald Trump, criticando su actitud y sus intentos de cuestionar los resultados de las elecciones de 2020, donde perdió ante Joe Biden. En un discurso sincero que resuena en Hollywood, admitió no sentirse identificado con ninguno de los dos principales partidos, pero enfatizó que apoyar a Harris es crucial para disminuir el creciente clima de "ira" entre los estadounidenses.

Desde que dejó la política, el actor ha estado muy activo en Hollywood, participando en proyectos como 'Los mercenarios II', en un regreso triunfal al cine de acción junto a estrellas como Sylvester Stallone y Bruce Willis. Aunque se ha distanciado gradualmente de la política, Schwarzenegger no se ha olvidado de su pasado y mantiene un diálogo constante con aspirantes políticos y expertos, buscando siempre fomentar un debate constructivo.

Su proyecto actual más relevante es el Instituto Schwarzenegger (USC), que él fundó tras salir del cargo de gobernador. Este instituto se centra en promover la discusión pública y trabajar en soluciones sobre temas cruciales como la energía y el cambio climático. Su enfoque en el pospartidismo busca reorientar la política hacia las necesidades del ciudadano, en lugar de las agendas partidistas.

Schwarzenegger ha hecho pública su opinión en una carta donde confiesa que "no suele hacer respaldos" y critica el estado actual de la política, desafiando la ideología de ambos partidos. Su malestar proviene de la sensación de que los líderes actuales manipulan el sistema en detrimento del pueblo. Aboga por un enfoque colaborativo en políticas públicas, haciendo un llamado a trabajar en conjunto en lugar de atacarse mutuamente.

A pesar de sus críticas, Schwarzenegger ha decidido votar por Harris y su candidato a vicepresidente, Tim Walz, argumentando que es el único camino para avanzar como país y combatir la polarización que se ha apoderado de la nación. Este es un apoyo significativo para Harris, especialmente en un momento crucial como el actual, donde puede implicar una ventaja en las próximas elecciones.

La relevancia de su respaldo se ve acentuada por su historia política: tras dejar la gobernatura con un bajo índice de aceptación, su imagen ha mejorado significativamente a lo largo de los años. Harris, que también cuenta con el apoyo de otros republicanos decepcionados con Trump, ahora se encuentra en una posición más sólida con esta insinuación de respaldo.

La campaña de Harris ha enfrentado desafíos en días recientes, especialmente tras un desliz del presidente Biden al referirse a los seguidores de Trump de manera despectiva, lo que ha provocado reacciones encendidas por parte de los republicanos. En medio de esto, Harris ha intentado distanciarse de esos comentarios, recalcando su desacuerdo sobre criticar a las personas basándose en sus votaciones.

La dinámica actual entre los demócratas y el rechazo a Trump se siente más intensa que nunca. Schwarzenegger, consciente de la estela de divisiones que deja el expresidente, llama a los votantes a "pasar página" y a no dejarse arrastrar por el desprecio que él argumenta que ha caracterizado el mandato de Trump. Con su apoyo, Harris espera atraer a un electorado cansado de la polarización y en busca de un cambio significativo. El futuro de la política estadounidense podría estar en juego el 5 de noviembre, cuando los votantes se dirijan a las urnas para decidir el rumbo del país.