El futuro del emblemático santuario de Torreciudad está ahora en manos de la Santa Sede. Luego de meses de intensas negociaciones y un acuerdo preliminar para regularizar el estatus del oratorio, la firma del acuerdo definitivo se ha postergado indefinidamente. Ante esto, el obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez Pueyo, frustrado por la situación, ha decidido elevar el asunto a la Santa Sede, solicitando que sea la Secretaría de Estado la que medie en el conflicto con el Opus Dei sobre la titularidad del oratorio dedicado a la Virgen, considerado uno de los grandes tesoros de la Obra.

Recientemente, Pérez Pueyo tuvo varias reuniones en la Santa Sede, donde se reunió con miembros de la Secretaría de Estado y del Dicasterio del Clero, así como con el Papa Francisco, a quien entregó toda la documentación referente a las conversaciones fallidas que se llevaron a cabo con el Opus Dei. Según informó la diócesis de Barbastro-Monzón, esta ha puesto en manos de la Santa Sede la solución a las diferencias que existen con la Prelatura del Opus Dei sobre la regularización del estatus jurídico, canónico y pastoral de Torreciudad.

No solo esto, sino que se ha revelado que el conflicto sobre Torreciudad ha generado tensiones no solo entre la diócesis y el Opus Dei, sino también dentro de la misma estructura de la iglesia, afectando la autoridad del obispo. De hecho, durante la tradicional Jornada de Familias en Torreciudad, la que fue presidida por Pérez Pueyo, se reportó que la Obra boicoteó el evento al ignorar al obispo y mantener en su sitio web al anterior rector, a pesar de ser este reemplazado por José Mairal, designado por el obispo.

La disputa se centra en el control de Torreciudad, un lugar icónico que genera más de un millón de euros al año en ingresos por las visitas de los fieles. Fuentes eclesiales han expresado su preocupación por los fracasos en el acuerdo, acusando a medios vinculados al Opus de tratar de influir en el resultado de las negociaciones que han supuesto reiterados intentos de acercamiento sin éxito.

Desde enero de 2023, las relaciones se han deteriorado aún más después de que el Opus Dei denunció al obispo tras su nombramiento del nuevo rector. El caso sigue en la Signatura Apostólica, en espera de una resolución que por ahora no llega. En anteriores encuentros, el Obispo había solicitado la revisión del contrato firmado en 1962, un acuerdo que ha sido objeto de controversia desde entonces, haciendo alusión a la recuperación de la imagen de Nuestra Señora de los Ángeles, patrimonio de la diócesis pero venerado en el santuario.

Cabe recordar que este contrato fue legitimado antes de que el Opus Dei se convirtiera en prelatura personal, y fue firmado con una entidad que ya no existe. Tras meses de negociaciones infructuosas, la diócesis ha declarado nulo el acuerdo y solicitado la restitución de la figura devocional y del control del recinto, algo que la Obra ha rechazado rotundamente. La diócesis también aclaró que la discusión actual no se basa en temas económicos, reiterando que buscan una clara solución pastoral y canónica. Además, se afirma que Roma apoya la futura transformación de Torreciudad en un santuario diocesano y respalda la decisión del obispo de nombrar a un nuevo rector que el Opus Dei todavía no reconoce. La situación es altamente volátil, y la espera por una respuesta del Papa Francisco añade más intriga a este conflicto que tiene a todos los involucrados en ascuas.