Teresa Ribera, actual vicepresidenta de Transición Energética, ha hecho una fuerte acusación en relación a la reciente catástrofe provocada por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que afectó gravemente a la Comunidad Valenciana. Durante su examen para un puesto en el Parlamento Europeo, Ribera dejó claro que la responsabilidad de los daños recae en el gobierno de Carlos Mazón. Aseguró que las alertas meteorológicas fueron emitidas a tiempo, pero lamentó que las autoridades locales no actuaran en consecuencia.

"El Gobierno nacional es responsable de activar las alertas y de seguir el flujo del agua, mientras que el resto de la gestión es responsabilidad de las comunidades autónomas", explicó Ribera, subrayando que se trataba de una 'alerta roja' que no fue tomada enserio por el gobierno regional.

Este acontecimiento, que ha llevado a una serie de críticas hacia la gestión de la crisis por parte del gobierno de Mazón, también provocó reacciones en el Parlamento Europeo. Raúl de la Hoz, eurodiputado del Partido Popular Europeo, acusó a Ribera de "mentir", ya que, según él, la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) no tiene la facultad de activar o desactivar alertas.

El caso ha ganado atención mediática considerable, especialmente debido a la presión política que se está generando en torno al nombramiento de Ribera. Fuentes cercanas al Partido Socialista (S&D) han indicado que están trabajando para defender a Ribera, vinculando su situación al futuro del candidato italiano Raffaele Fitto, lo que añade una dimensión de estrategia política internacional a esta crisis.

La intensidad del debate también se reflejó en las preguntas realizadas a Ribera, quien tuvo que enfrentar cuestionamientos difíciles, incluso de eurodiputados de otros países, mostrando que el tema ha trascendido fronteras. La representante socialista dejó claro que el cambio climático es una preocupación crítica, afirmando: "La mayor preocupación para mis hijos y nietos es la negación del impacto del cambio climático y sus efectos en la economía". Esta afirmación resuena especialmente en el contexto actual de crisis medioambiental que el mundo enfrenta.

Mientras la polémica continúa, los ciudadanos de la Comunidad Valenciana exigen respuestas y acciones para prevenir futuras tragedias, subrayando la importancia de una gestión adecuada de emergencias y de la colaboración entre gobiernos locales y nacionales. ¿Está realmente el gobierno nacional tomando las medidas necesarias para proteger a la ciudadanía? El tiempo lo dirá.