El consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz, ha confirmado que las medidas implementadas en el embalse de Monte Félix-Toril han sido exitosas, permitiendo el regreso de los 105 vecinos desalojados de la pedanía de Cueva de la Mora en Almonaster la Real. Este regreso se llevará a cabo este viernes después de que la Agencia de Emergencias de Andalucía (EMA) informara a los vecinos sobre las gestiones realizadas para garantizar su seguridad.

Durante su tiempo de desalojo, los vecinos pudieron alojarse temporalmente en casas de familiares y amigos, así como en instalaciones hoteleras proporcionadas por el consistorio local. Además, la Cruz Roja estuvo presente para ofrecer apoyo logístico, asegurando que las necesidades de las personas evacuadas fueran atendidas. Antes de su retorno, pudieron regresar a sus hogares en pequeños convoyes organizados con la Guardia Civil para recuperar a sus mascotas y recoger medicamentos.

Las medidas de emergencia incluyeron la activación de once bombas y autobombas de extracción, capaces de eliminar más de dos millones de litros de agua por hora del embalse. Esta operación, junto al trabajo de limpieza y reapertura de aliviaderos, fue crucial para disminuir el nivel del agua y mitigar el riesgo de inundación. Gracias a estos esfuerzos, el nivel del agua ya se encontraba por debajo de los aliviaderos, lo que alivió la presión sobre la estructura del embalse.

Tras estas acciones, la Consejería de la Presidencia ha reducido el Plan de Emergencia ante el Riesgo de Inundaciones en Andalucía (PERI) a fase de preemergencia, lo que implica la continuidad de las operaciones hasta al menos las 10:00 horas del sábado. Esta fase se centra en la vigilancia constante de la situación y la operación de las bombas de extracción.

Antonio Sanz alabó el excelente trabajo de los especialistas de la EMA y de la Dirección General de Infraestructuras del Agua, quienes resolvieron esta compleja situación de manera rápida y eficaz. Destacó también la importancia de los datos recolectados por los drones durante las labores, lo que mejoró la estrategia de intervención.

Más de 50 personas, incluyendo efectivos de Protección Civil, Infoca, y del Centro de Emergencias Sanitarias (CES 061), trabajaron incansablemente en el área para garantizar la seguridad y bienestar de los evacuados, además de colaborar con la Policía Local y la Guardia Civil, quienes mantuvieron un control riguroso durante la emergencia. A medida que los vecinos regresan a su hogar, la comunidad se une para garantizar que este tipo de incidentes no vuelvan a ocurrir.