El miedo y la salud cardiovascular

Cuántas veces hemos escuchado expresiones como 'me has dado un susto de muerte' o 'iba por una calle oscura y casi me muero de miedo'. Aunque suenen exageradas, estas afirmaciones podrían tener un trasfondo más literal del que imaginamos.

En la actualidad, con la popularidad de las festividades relacionadas con lo sobrenatural y el Halloween, es pertinente preguntarse sobre los efectos del miedo extremo en la salud. Según la Fundación Española del Corazón, aunque es poco común, un susto intenso puede, de hecho, ser fatal. Esto se debe a lo que los médicos denominan el síndrome del corazón roto, o miocardiopatía de estrés, también conocido como Takotsubo.

El síndrome del corazón roto

Rosario Ortas, jefa del Servicio de Cardiología del Hospital Miguel Servet de Zaragoza, explica que un 'shock' emocional intenso, como recibir una mala noticia o experimentar una discusión acalorada, puede debilitar temporalmente el músculo cardíaco, lo que puede resultar en complicaciones graves, incluso en la muerte. Esta condición simula un infarto de miocardio en personas cuya salud cardiovascular es vulnerable.

Aunque la mayoría de los casos se resuelven rápidamente, la miocardiopatía de estrés puede provocar insuficiencia cardiaca y arritmias, especialmente en personas con problemas cardíacos preexistentes. Pedro J. Serrano Aisa, también cardiólogo en Zaragoza, añade que aquellos con antecedentes cardiovasculares son más propensos a sufrir estas reacciones agudas ante situaciones de gran estrés emocional.

El miedo y el sistema nervioso

Además de los sustos repentinos, otros factores pueden influir en el corazón. Cuando una persona experimenta un fuerte miedo, el Sistema Nervioso Simpático se activa, aumentando la frecuencia cardiaca y la presión arterial. Beatriz Ordoñez, cardióloga de HC Miraflores, menciona que esto puede tener consecuencias graves, incluso para aquellos con el Síndrome de QT Largo, un trastorno del ritmo cardíaco poco común.

Factores de riesgo y salud cardíaca

La ansiedad y el estrés constante han sido correlacionados con un mayor riesgo de enfermedad cardíaca. Circunstancias específicas, como catástrofes naturales, eventos deportivos con alta carga emocional o crisis climáticas, han demostrado contribuir a un aumento de la mortalidad cardiovascular. Un estudio en Estados Unidos reveló que cada día de exposición a temperaturas extremas aumentaba el riesgo de muerte cardiovascular, lo que subraya la crítica importancia del manejo del estrés en nuestra vida cotidiana.

Prevención y cuidado del corazón

¿Cómo podemos proteger nuestro corazón y prevenir los efectos negativos del miedo extremo? Se sugiere que cada individuo trabaje en su manejo de estrés, minimizando las situaciones potencialmente impactantes. Practicar ejercicios de respiración, meditación y yoga puede ser beneficioso.

La alimentación juega un papel fundamental también. Seguir una dieta equilibrada que contenga frutas, verduras y proteínas magras, así como adoptar la famosa dieta mediterránea, rica en aceite de oliva, frutos secos y pescado, puede contribuir a un corazón saludable. Controlar regularmente los factores de riesgo, como la presión arterial y los niveles de colesterol, es vital para mantener la salud cardíaca.

Conclusión

Recuerda, si alguna vez sientes un miedo extremo, no solo estás poniendo en riesgo tu bienestar emocional, sino que también podría tener consecuencias devastadoras para tu salud física. No subestimes el poder del miedo y considera realizar chequeos regulares para cuidar tu corazón, porque a veces, el miedo real puede ser más que un simple susto.