¡Nicola Luisotti Brilla en el Liceu con ‘La forza del destino’ de Verdi!
2024-11-10
Autor: Lucia
La aclamada ópera ‘La forza del destino’ de Giuseppe Verdi, considerada una obra maldita, resuena con fuerza y emoción en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona, gracias a la dirección magistral de Nicola Luisotti. La historia detrás de esta pieza está marcada por dos trágicos eventos en 1960: la muerte del barítono Leonard Warren en plena actuación en el Metropolitan Opera House de Nueva York y el fallecimiento del director Dimitri Mitrópoulos en Viena. Estos incidentes han contribuido a la leyenda oscura que rodea a esta obra.
Luisotti, un reconocido director de orquesta italiano, debutó en el Liceu y sorprendió a todos con una interpretación rica en matices, donde logró conectar cada nota con los sentimientos y las intensas emociones de la trama. A pesar de la decisión controvertida del director de escena Jean-Claude Auvray de reubicar la obertura al final del primer acto, Luisotti transformó esta elección en un triunfo, convirtiendo la obertura en uno de los momentos más aclamados por el público.
La orquesta del Liceu, con una brillante dirección de Luisotti, dio vida a los dramáticos pasajes de la obra, donde los temas orquestales se entrelazan con un remolino de destino y esperanza. El clarinete de Darío Mariño, que brilló en el inicio del tercer acto, evocó una conexión profunda con la obra original de Verdi, que fue escrita con la intención de resaltar la tragedia.
Las actuaciones vocales fueron igualmente impresionantes. La soprano italiana Anna Pirozzi interpretó a Leonora con una intensidad emocional que dejó al público sin aliento. Su aria “Pace, pace, mio Dio” en el cuarto acto se convirtió en un momento memorable de la velada, donde alcanzó notas celestiales que resonaron en el corazón de todos los presentes.
El tenor Brian Jagde, en el papel de Don Álvaro, mostró su fuerza vocal y emotiva, aunque a veces su interpretación se vio limitada en términos de dinámica. Sin embargo, su entrega fue palpable, especialmente en el tercer acto. Artur Ruciński también se destacó como Don Carlo di Vargas, aportando profundidad al personaje, aunque algunos críticos consideran que su interpretación podría haber explorado más la complejidad emocional del rol.
En cuanto a la escenografía, la producción de Auvray, que mantiene la esencia de la versión de 1869, ofreció un enfoque monumental y evocador que transportó a los espectadores a épocas pasadas. La escenografía de Alain Chambon y el vestuario de Maria Chiara Donato, combinados con una iluminación dramática, crearon atmósferas impactantes que complementaban la narrativa de la ópera.
Antes de la representación, se hizo un emotivo homenaje a las víctimas de la DANA en Valencia, con una interpretación a solo de violonchelo de ‘El cant dels ocells’, creando un ambiente de reflexión y unión en la sala.
Sin lugar a dudas, esta producción de ‘La forza del destino’ en el Liceu no solo rinde homenaje a la grandeza de Verdi, sino que también destaca el inmenso talento del elenco y la dirección musical de Luisotti, dejando al público esperando con ansias la próxima función.