Kylian Mbappé ha decidido no unirse a la selección francesa para sus dos próximos partidos durante este parón internacional, generando una gran polémica en Francia. Su ausencia no se debe a ninguna lesión, sino a su deseo de realizar una minipretemporada en Madrid para mejorar su estado físico. El seleccionador francés, Didier Deschamps, comentó: "El empleador de Mbappé es el Madrid, no la Federación francesa", tratando de calmar la controversia en torno a la estrella del equipo.

La decisión de Mbappé de quedarse en Madrid no es casual; la Eurocopa de este verano fue un torneo complicado para él, ya que sufrió una fractura de nariz en el primer partido contra Austria y, aunque su equipo llegó a las semifinales, las críticas hacia su rendimiento fueron intensas. Los aficionados esperaban más de un jugador de su calibre, especialmente con las grandes expectativas que siempre lo rodean.

Apenas una semana después de esa desafortunada eliminación, Mbappé fue presentado como nuevo jugador del Real Madrid en un acto emocionante en el Santiago Bernabéu. Hizo su debut oficial con el Madrid el 14 de agosto en la Supercopa de Europa, donde anotó un gol decisivo que contribuyó a la victoria del equipo.

A pesar de sus buenos números (siete goles y una asistencia en 11 partidos), su rendimiento no ha sido el esperado. Consciente de esto y sintiéndose en deuda con su nuevo club, ha optado por no participar en los Juegos Olímpicos de París, en los que la selección francesa llegó a la final pero fue derrotada nuevamente por España.

Por si fuera poco, el jugador también sufría las consecuencias de una lesión muscular sufrida ante el Alavés el 24 de septiembre, lo que limitó su tiempo de recuperación antes de esta ventana de selecciones. La decisión de Mbappé de priorizar su trabajo físico bajo la supervisión del preparador Antonio Pintus podría ser crucial para mejorar su forma y ayudar al Real Madrid a alcanzar sus objetivos esta temporada. ¿Podrá Mbappé despegar y silenciar a sus críticos antes de que finalice el año?