Los Ángeles enfrenta una situación crítica este martes (14 de enero de 2025), ya que los fuertes vientos cálidos pueden reavivar e intensificar los devastadores incendios que han arrasado colinas y suburbios, resultando en al menos 25 muertos y cuantiosos daños en la segunda ciudad más grande de Estados Unidos.

Una semana después de que los incendios comenzaran a expandirse sin control, se anticipa el regreso de los vientos de Santa Ana, descritos como "particularmente peligrosos", que pueden alcanzar ráfagas de hasta 110 km/h entre las 03:00 y las 15:00 del miércoles. El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) ha emitido advertencias claras: "Esté atento a su entorno. Prepárese para evacuar. Evite cualquier cosa que pueda provocar un incendio".

Las zonas más afectadas, como parte del condado de Los Ángeles y el vecindario de Ventura, se encuentran en una "situación muy peligrosa", un peligro que ya se había anticipado antes de que estallaran los incendios mortales. La jefa de bomberos de Los Ángeles, Kristin Crowley, aseguró que se han posicionado estratégicamente equipos de bomberos y grupos de tareas para responder rápidamente a cualquier nuevo incendio.

Hasta ahora, se han carbonizado aproximadamente 9.700 hectáreas en la lujosa localidad de Pacific Palisades y casi 5.700 hectáreas en Altadena, lo que representa una devastación sin precedentes. Más de 90.000 personas han sido evacuadas, sumergidas en la incertidumbre sobre el futuro de sus hogares.

Fred Busche, uno de los afectados, expresó su angustia: "Mi casa ha desaparecido. Solo queda la chimenea. Estoy devastado". No obstante, hay historias de valentía, como la de Jeff Ridgway, quien arriesgó su vida luchando contra las llamas en un complejo de apartamentos, utilizando baldes de agua de la piscina en un intento heroico por salvar su hogar.

El sheriff del condado de Los Ángeles, Robert Luna, informó que los equipos de búsqueda, que utilizan perros rastreadores, han estado inspeccionando los escombros, una tarea desgastante y dolorosa. "Cada día encontramos restos de miembros de la comunidad. Es desgarrador", lamentó Luna.

Las proyecciones de AccuWeather estiman que el costo total de esta tragedia podría oscilar entre 250.000 y 275.000 millones de dólares, lo que la convertiría en una de las catástrofes más costosas en la historia de Estados Unidos. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, bajo un profundo impacto emocional, comentó: "La destrucción masiva es inimaginable. Verlo desde el aire es simplemente aterrador".

Ante la posibilidad de nuevos incendios, miles de bomberos han sido movilizados, especialmente para atender un nuevo foco de incendio declarado a última hora del lunes en Oxnard, a unos 80 km de Los Ángeles. Además, las autoridades federales han iniciado una investigación sobre las causas de los incendios, aunque han advertido que puede llevar tiempo esclarecerlo.

Mientras tanto, con miles de personas afectadas, la comunidad espera ansiosamente noticias positivas. La industria del entretenimiento, que alberga gigantes como Netflix, Disney y Amazon, ya ha comenzado a realizar donaciones significativas para el esfuerzo de reconstrucción. Cientos de voluntarios también se han movilizado para distribuir suministros a los evacuados y ayudar a quienes más lo necesitan en estos momentos difíciles.

La situación sigue siendo crítica y la población de Los Ángeles se aferra a la esperanza mientras luchan por recuperarse de este desastre natural sin precedentes.