En un contexto geopolítico cada vez más complejo, la jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, ha subrayado la importancia del vínculo entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, considerado su "aliado más fuerte". A pesar de que la atención a menudo se centra en el desafío que representa China, Kallas ha señalado que la mayor preocupación para Washington es Pekín. Sin embargo, advierte que si la UE y EE.UU. no manejan adecuadamente la situación con Rusia, tampoco podrán afrontar eficazmente el reto chino.

La líder comunitaria, conocida por sus críticas abiertas hacia el Kremlin, enfatiza que la seguridad de Ucrania contra la agresión rusa es esencial para la estabilidad de Europa. "La debilidad ante Rusia solo alimenta la confianza de nuestros rivales estratégicos. El mensaje que la UE necesita transmitir a EE.UU. es claro: debemos hacer más por nuestra propia defensa y asumir nuestra parte de responsabilidad por la seguridad de Europa", afirmó Kallas.

Kallas también resaltó que China está observando de cerca cómo responde la comunidad transatlántica a la invasión rusa de Ucrania, enfatizando la necesidad urgente de aprender de esta experiencia. "La agresión como herramienta de política exterior nunca puede resultar beneficiosa", añadió.

Respecto a la amenaza que representa Rusia, Kallas describió al país como "fuertemente militarizado" y resaltó que representa una amenaza existencial. "Rusia debe asumir la responsabilidad de sus acciones y enfrenta consecuencias", manifestó Kallas, quien reveló que los beneficios de más de 3.000 millones de euros provenientes de activos congelados rusos se están destinando al apoyo militar en Ucrania, incluyendo másmunición y defensa aérea. Además, se espera que para fin de mes la UE haya entrenado a 75,000 soldados ucranianos, lo que representa un esfuerzo significativo en el apoyo a este país devastado por la guerra.

En el ámbito de la defensa, Kallas coincidió con las declaraciones de Trump respecto a que la UE no está invirtiendo lo suficiente en este sector. "Es hora de que invirtamos. Necesitamos un esfuerzo conjunto no solo de los Estados miembros, sino también del sector privado y del presupuesto comunitario europeo", indicó.

La diplomática aseguró que no es necesario un ejército europeo unificado; más bien, la UE necesita "veintisiete ejércitos individuales que puedan colaborar eficazmente para disuadir a nuestros rivales". En cuanto al Reino Unido, sugirió que establecer un acuerdo sólido entre Londres y Bruselas sobre seguridad y defensa sería "el próximo paso lógico" para fortalecer la protección colectiva en Europa.

Este impulso hacia un mayor gasto en defensa y un fortalecimiento de las relaciones transatlánticas busca preparar a Europa ante los desafíos globales, una advertencia que resuena con urgencia en tiempos donde la seguridad y la estabilidad son más críticas que nunca.