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La sorprendente transformación del 'asesino' Karim: de las playas de Dalía a la prisión

2024-09-25

Karim El Baqqali, un marroquí de 32 años, ha visto su vida dar un giro radical en cuestión de horas. Este hombre, acusado de asesinar a dos guardias civiles e intentar matar a otros cuatro, pasó de disfrutar de un relajante verano en Dalía, un pintoresco pueblo costero en la costa andaluza, a ser recluido en la prisión de Puerto II en El Puerto de Santa María.

La Guardia Civil detuvo a Karim el pasado viernes tras su entrega voluntaria, que tuvo lugar cuando llegó en barco a la playa de la Hierbabuena. Durante su declaración, admitió haber pilotado la embarcación que impactó contra el barco del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) el 9 de febrero. Su alegato se centró en que el incidente fue un accidente, alegando que estaba asustado y que no tenía la experiencia necesaria para navegar en condiciones difíciles.

Durante los últimos siete meses, Karim había sido considerado un 'objetivo prioritario' para las fuerzas policiales españolas. A pesar de las graves acusaciones en su contra, las imágenes recientes sugieren que durante ese tiempo llevaba una vida relativamente normal. Se le vio en varias ocasiones disfrutando de días de playa en Dalía, paseando en moto con amigos, lo que refuerza la idea de que no mostraba temor a ser arrestado.

Sin embargo, su situación ahora es completamente diferente. Una vez en prisión, se encuentra en el módulo de ingresos donde está siendo evaluado por un equipo médico y psicológico. Según fuentes, ha sido asignado un 'prisionero sombra' para garantizar su seguridad. Su situación es delicada, ya que se le investigan varios delitos graves: dos asesinatos, cuatro intentos de asesinato, y más.

Además, se anticipa que su estancia en Puerto II podría ser temporal. Podría ser trasladado a otro centro debido al revuelo mediático que ha causado su caso y a las posibles amenazas que podría enfrentar por su implicación en el mundo del narcotráfico.

Karim también está esperando ser padre dentro de unos meses, lo que complica aún más su situación, ya que su abogado ha solicitado un traslado a otra prisión por motivos familiares. A medida que avanza el proceso judicial, la atención sobre su caso se intensifica, convirtiéndolo en una figura aún más relevante en las noticias sobre crimen y justicia en España.

Este dramático cambio en la vida de Karim es un recordatorio de cómo a veces, el destino puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos, y un verano de despreocupación puede transformarse en un largo periodo tras las rejas, enfrentando una dura realidad.