
La Fundación que Persigue a Criminales de Guerra Israelíes: "No Podemos Detener la Guerra, pero Ofrecemos Esperanza"
2025-08-25
Autor: María
Una Misión de Justicia Internacional
Dyab Abou Jahjah y Karim Hassoun han dado vida a la Fundación Hind Rajab desde septiembre de 2024, lanzando una cruzada destinada a identificar y capturar a supuestos criminales de guerra, específicamente aquellos involucrados en el conflicto de Gaza, para rendirlos ante la justicia internacional.
Justicia Más Allá de las Fronteras
Hassoun, en una entrevista con RNE, subraya la ambición de la fundación: "Usamos el derecho internacional y convenios que protegen a las personas contra crímenes de guerra, buscando no solo a líderes como el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, sino también a los soldados que ejecutan órdenes y contribuyen al genocidio". Su objetivo es claro: si bien no pueden detener la guerra, anhelan ofrecer esperanza y justicia a los millones de inocentes que sufren en Gaza.
Apuntando a Todos los Culpables
La Fundación no discrimina entre responsables: "Para nosotros, todos los que participan en el genocidio, desde figuras políticas hasta los soldados, son objetivos potenciales. No buscamos venganza; queremos justicia". Han presentado informes cruciales, como el caso del asesinato del periodista de Al Jazeera, Anas al-Sharif, y cinco colegas más en un bombardeo israelí.
Un Arresto Histórico en Bélgica
El 21 de julio, un acontecimiento sin precedentes tuvo lugar: dos soldados israelíes fueron arrestados en Bélgica, acusados de crímenes de guerra. Este hito, propiciado por la denuncia de la Fundación Hind Rajab y Global Legal Action Network, marcó la primera vez que un soldado israelí enfrenta cargos por crímenes contra la humanidad fuera de Israel.
La Estrategia de Investigación Exitosamente Implementada
Karim Hassoun detalló el proceso detrás de este arresto: "Identificamos a los soldados a través de redes sociales donde se jactaban de sus crímenes. Compilamos pruebas robustas y las presentamos a la fiscalía belga, quien encontró suficiente fundamento para proceder con un arresto". Sin embargo, tras interrogatorios, fueron liberados, lo que genera inquietud acerca de su futuro regreso a las tropas.
La Memoria de Hind y su Legado
La Fundación lleva el nombre de Hind Rajab, una niña de cinco años que fue asesinada en un trágico ataque por el ejército israelí mientras intentaba escapar de las bombas. Su dolorosa historia, donde se menciona que la ambulancia que llegó para rescatarla fue igualmente atacada, ilustra la necesidad de justicia y memoria colectiva que impulsa a esta organización.
Un Llamado a la Responsabilidad Global
Hassoun concluye con una fuerte crítica a la comunidad internacional, enfatizando que las jurisdicciones nacionales deben responsabilizarse: "Si hay pruebas claras de crímenes de guerra, deben actuar. No podemos permitir que estos criminales escapen mientras continúan su violenta trayectoria".